Se agotan en una semana los 29.400 bonos del Ayuntamiento de Sevilla para incentivar las compras

El Ayuntamiento de Sevilla ha culminado en solo una semana la distribución de los 29.400 bonos con descuentos de la campaña para incentivar las compras y el consumo en comercios y en servicios de proximidad de la ciudad. La iniciativa Bono Sevilla, que se ha puesto en marcha a través de la Delegación de Economía, Comercio, y Turismo, ha contado con la adhesión de un total de 414 establecimientos de toda la ciudad, donde los consumidores podrán realizar sus compras con estos bonos hasta el próximo 30 de noviembre.

Los bonos que ya se han distribuido en su totalidad cuentan con un descuento de 20 euros cada uno para compras mínimas de 50 euros. El presupuesto de esta nueva iniciativa, que se ha concebido este año como experiencia piloto y toma como referente modelos similares en otras ciudades españolas, alcanza los 600.000 euros y tiene como objetivo incentivar la compra en el pequeño comercio ante la actual coyuntura económica.

El delegado de Economía, Comercio, y Turismo, Francisco Páez, ha destacado que “a tenor de la rápida distribución de los 29.400 bonos con descuento, cabe resaltar la buena acogida que esta campaña ha tenido, no solo entre el sector del comercio, sino también entre los consumidores, por lo que damos por cumplido el objetivo que nos marcamos con la puesta en marcha de esta iniciativa que trata de fomentar las compras en el pequeño comercio de forma directa y, al mismo tiempo, beneficiar a las familias en la actual situación económica”.

Hasta el 30 de noviembre, inclusive, quienes hayan adquirido el bono con descuento podrán comprar y consumir en los establecimientos adheridos, que deben ejercer su actividad en la ciudad como comercio minorista, exceptuándose tabacos y artículos para el fumador y artículos de farmacia. Además del comercio, también están incluidos la pequeña hostelería y los servicios de proximidad como peluquerías, tintorerías, etc.

Cada bono está bonificado con 20 euros para compras de 50 euros como mínimo y el consumidor ha podido adquirir hasta un máximo de cinco. El bono tiene un código QR que será escaneado por el establecimiento comercial en el momento de pagar la compra. Al finalizar la semana, el comerciante recibe el importe de la liquidación de las compra. Si el consumidor ha adquirido cinco bonos y los agota, habrá pagado 150 euros y habrá realizado una compra o consumido un servicio por valor de 250 euros, por lo que el Ayuntamiento habrá aportado 100 euros.

Con esta iniciativa, el volumen de compras alcanzará los 1,47 millones de euros en aquellos establecimientos comerciales y hosteleros considerados microempresas o que estén regentados por autónomos. En otras palabras, la compra mínima será de 50 euros, de los que 20 euros son aportación municipal, mientras que el consumidor habrá abonado 30 euros. Si el importe de la compra o del consumo supera los 50 euros, el cliente abonará in situ la diferencia en el establecimiento.