La aglomeración apenas repercute en las arcas del comercio

Calles llenas y tiendas medio vacías. Ésta es la estampa que dibujan del pasado puente los comerciantes del centro, un balance mucho más comedido y menos triunfalista que el que presenó este martes el alcalde a los medios de comunicación. El vicepresidente de la asociación de comerciantes del centro (Alcentro), Tomás González, aseguró a este periódico que las ventas "se han mantenido igual que el año pasado".

Pese a ello, González mostró la satisfacción general del sector "por la masiva llegada de público al casco antiguo". "Esto quiere decir que se ha recuperado un hábito perdido, como es el de venir al centro en lugar de irse fuera, como venía ocurriendo hasta ahora", apuntó el representante de Alcentro. Sin embargo, esta masificación provoca también efectos negativos para las tiendas: "Al cliente le gusta moverse por zonas donde pueda andar, por ello no se puede sobredimensionar la oferta de ocio en el centro. Hay que equilibrarla con la del comercio", señala González.

Una de las quejas del colectivo es que el Metrocentro haya dejado de funcionar algunas horas por la cantidad de personas que se concentraron en la Avenida de la Constitución. "No se puede permitir que la gente no llegue a la Plaza Nueva. Habrá que perfilar alguna medida para evitar que el tranvía deje de funcionar por aglomeración, como la colocación de vallas u otro elemento que permita la circulación", asegura Tomás González.

Los comerciantes confían en que esta Navidad el consumo se reactive gracias a que los funcionarios (de los que hay un alto número en Sevilla) cobrarán parte de la extra que en 2012 les retiró el Gobierno por estas fechas.