La advertencia de Lipasam a los que abandonan la basura en las calles de Sevilla

La empresa municipal de limpieza ha empezado a colocar pegatinas en las bolsas en las que señala las sanciones a las que se puede enfrentar el infractor

Los efectivos para tal cometido han aumentado también un 60%

Sevilla apuesta por un contenedor para la basura más "accesible y eficiente"

Numerosas bolsas de basura abandonadas junto a una papelera en una calle del centro de Sevilla.
Numerosas bolsas de basura abandonadas junto a una papelera en una calle del centro de Sevilla. / D. S.

Mano dura contra el infractor. Lipasam, la empresa municipal de limpieza de Sevilla, ha incrementado en los últimos meses la presión contra los ciudadanos incívicos que abandonan las bolsas de basura en una esquina o junto a una papelera. En lo que va de año se han incrementado las inspecciones y las sanciones; y en las últimas semanas se ha comenzado a ver una nueva campaña disuasoria: poner pegatinas de advertencia en las bolsas. Con esta nueva medida se advierte a la persona que abandona los residuos a su suerte que se trata de una acción castigada con importantes multas económicas. Y no es un hecho baladí, porque de manera recurrente los inspectores de la empresa rebuscan en las bolsas en busca de algún dato que identifique a la persona para proceder a la sanción correspondiente.

El abandono de la basura en la calle es una de las principales quejas de los vecinos de Sevilla. Fundamentalmente ocurre en el Casco Antiguo, distrito en el que se eliminaron la mayor parte de los grandes contenedores y se sustituyeron por recipientes individuales. Cada vecino o comunidad es la responsable de custodiar el cubo durante el día, de sacarlo a la calle a partir de las ocho de la tarde y de recogerlo por la mañana. 

Pero lo cierto es que el sistema nunca ha sido aceptado del todo por los residentes. Ocurre que muchos de los bloques de algunos barrios, como San Lorenzo, no cuentan con espacio para guardarlos, o que los vecinos son de edad avanzada para poder hacer con soltura estas tareas. El resultado es que las bolsas se dejan en cualquier esquina sin más. Uno de los lugares más céntricos en los que es muy frecuente ver cantidad de desperdicios es la esquina de la iglesia de San Buenaventura, a apenas unos metros de la Plaza Nueva, donde radica el Ayuntamiento.

Una de las pegatinas que advierte de las consecuencias de abandonar las bolsas.
Una de las pegatinas que advierte de las consecuencias de abandonar las bolsas. / D. S.

A ello hay que sumar que con la proliferación de los apartamentos y las viviendas de uso turístico, el abandono de la basura en la calle se ha multiplicado exponencialmente. El Ayuntamiento procedió hace unos años a la instalación de carteles en los puntos turísticos más relevantes para advertir de que no dejaran la basura en esos lugares. Ahora, la iniciativa de Lipasam consiste directamente en advertir al infractor con esas pegatinas en las bolsas.

La delegada de Limpieza, Arbolado y Parques y Jardines, Evelia Rincón anunció hace unas semanas el aumento de las actuaciones de este servicio inspecciones durante el primer año de mandato del gobierno de José Luis Sanz. Las denuncias interpuestas por incumplimiento de la ordenanza, han pasado de las 1.741 a las 3.084, prácticamente el doble. Los efectivos para tal cometido han aumentado también un 60%. 

Una de las novedades de la ordenanza de limpieza elaborada por el gobierno municipal popular es el aumento de las sanciones por infracciones como pintadas vandálicas (que estarán multadas hasta con 3.000 euros) o sacar la basura de los contenedores. También contempla un incremento de la Inspección. Por ahora, eso sí, los cubos individuales para la recogida de los residuos en el Casco Antiguo se quedan como están.

Una de las novedades más importantes de la ordenanza concierne a los pisos turísticos, tal como informó Rincón. Sus propietarios están obligados a informar a los inquilinos del horario de recogida de la basura y de la obligación de depositarla en los contenedores cercanos, de los que se detallará su localización. Se intentará evitar, de esta forma, el abandono de bolsas en las inmediaciones de las viviendas. Estos datos también han de proporcionarse a las empresas o empleados que se encargan de la limpieza de dichos inmuebles.

Otra infracción para la que se aumentan las sanciones es “la rebusca” de basura en contenedores y otros recipientes. Pasan de leves a graves, con multas desde los 750 a los mil euros, en función de los residuos que se saquen fuera de los recipientes y el daño que causen en el entorno. De igual modo, se prohíbe el abandono de enseres en la vía pública, como colchones, mobiliario o cartones.

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