La aldaba
Carlos Navarro Antolín
La Sevilla fina en la caja de Sánchez-Dalp
Ofertas de ocio
El fondo del mar al pie del Guadalquivir. El Acuario de Sevilla reabrió el pasado 1 de julio sus puertas tras permanecer cerrado tres meses a consecuencia del estado de alarma. El vicepresidente de la Junta, Juan Marín, ha recorrido este viernes sus instalaciones en las que se ha instalado un protocolo de seguridad para cumplir con la normativa anti-Covid tanto entre sus visitantes como sus empleados. Un recorrido en el que contempló imágenes de gran belleza debido a la fauna marina que contiene y que pueden admirar los sevillanos, como oferta de ocio, durante este verano.
Como sumergirse en las aguas de un océano infinito. Ésa es la sensación que se logra en el visitante cuando accede a este recinto situado en el Muelle de las Delicias. El Acuario vuelve a estar abierto. Y lo hace ofreciendo las máximas medidas de seguridad a locales y foráneos.
El aforo estará limitado para evitar cualquier tipo de aglomeración. Con tal fin, se habilitado un sistema de control que informa en tiempo real del número de personas que hay dentro del acuario, en cuyo acceso hay instalada una alfombra desinfectante para garantizar que el calzado de los visitantes esté libre de virus y bacterias.
Son varias veces las que se realizan labores de limpieza al día. Los visitantes también disponen de dispensadores de desinfectante de manos. De igual modo, para que no se produzcan cruces de personas, se ha organizado un itinerario lineal dentro del recinto a partir de una puerta de entrada y otra de salida. El folleto del Acuario estará ahora disponible solamente en versión digital.
Quienes acudan al Acuario deben hacer uso siempre de la mascarilla, mantener en todo momento la distancia de seguridad con el resto de visitantes, intentar pagar -en la medida de lo posible- con tarjeta bancaria, por medio de dispositivo móvil o comprar las entradas a través de la venta on line. También se ruega que, una vez dentro, se evite tocar los cristales acrílicos de los tanques (una práctica bastante habitual en este tipo de recintos).
Durante los meses que ha durado el estado de alarma, el Acuario ha ofrecido desde su web una serie de actividades para hacer más llevadero el confinamiento a los menores. Así, se han propuesto manualidades, dibujos y crucigramas.
El diseño del Acuario de Sevilla está basado en la gesta que protagonizaron Elcano y Magallanes en la primera circunnavegación del mundo, de la que se cumple medio milenio. De esta forma, los visitantes pueden ver de cerca los seres marinos que acompañaron a los navegantes en la gesta, que comenzó en el Guadalquivir en agosto de 1519.
Una de las exposiciones relacionadas con dicha travesía es la dedicada a uno de los animales marinos más enigmáticos: las medusas. En esta muestra se podrán ver más de diez especies que habitan en el Acuario, no sólo en el espacio expositivo, sino en la zona de reproducción. Además, a través de los carteles educativos se pueden conocer los secretos de estos animales formados por un 95% de agua, así como todas las características de cada una de las especies. La exposición acoge especies de todos los mares del mundo, desde las más conocidas como la Aurelia aurita (medusa común) hasta las más exóticas como la Cassiopeia xamachana (medusa invertida).
Otra de las estancias que más llaman la atención y el interés de los visitantes es la dedicada a los tiburones. En ella se intenta concienciar a los visitantes de los peligros que acechan a estos animales, sus dificultades para sobrevivir en el medio natural y cómo ayudar a preservarlos.
El Acuario ofrece en su reapertura diferentes tipos de entradas individuales, así como pases especiales para familias y el día del espectador, que serán los jueves por la tarde, de 15:00 a 18:00.
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