Zoido negocia también con Altadis el futuro de la Fábrica de Tabacos
El alcalde ya ha mantenido reuniones para buscar una solución a la antigua factoría · "No quiero ni pensar que la Junta no colabore en el desbloqueo de Ikea", afirma.
El alcalde de Sevilla, Juan Ignacio Zoido, se ha reunido ya con directivos de Altadis, quienes han mostrado su interés por que se produzca el "desbloqueo" de la situación "cuanto antes", en línea con lo manifestado por el primer edil, que lamenta que la factoría sevillana sea la única que no ha tenido un desarrollo posterior tras su cierre a pesar de las infraestructuras que necesita la zona.
Tras visitar la escuela municipal de verano de Triana en el centro cívico El Tejar del Mellizo, Zoido explicó que ya ha mantenido una reunión de alto nivel con la compañía para tratar el futuro de estos terrenos, unas negociaciones que continuarán a partir de la próxima semana de la mano de la Concejalía de Urbanismo. Así, insiste en la necesidad de desbloquear la situación "lo antes posible", algo que la empresa "también tiene ganas de que se produzca".
Explica que la fábrica sevillana es la única en España que no ha tenido un desarrollo posterior al cierre. "Han existido acuerdos con CiU, PP, IU y PSOE, menos en Sevilla", señala el regidor municipal, que insiste en la necesidad de poner en valor esa zona importante de Sevilla, al lado del río, que también requiere de buenas infraestructuras y aparcamientos subterráneos, entre otros asuntos".
En cuanto a la instalación de Ikea en Sevilla, Zoido, que advierte de que no anunciará plazos ni avanzará los términos de la negociación mientras no esté todo firmado, recalca que la Junta de Andalucía "verá con buenos ojos, si se ha observado escrupulosamente la ley, la modificación del Plan General de Ordenación Urbana (PGOU). "Que la Junta ponga inconvenientes en Sevilla para poner un Ikea y lo facilite en otro término, poniendo en riesgo 4.000 puestos por preferencia de quien gobierna en un municipio, no quiero ni pensarlo, porque debe tener la misma responsabilidad con los sevillanos que con otros ciudadanos", sentencia.
Insiste en su disposición para modificar el PGOU "con estricta observancia de lo que marca la ley y con luz y taquígrafos". "Está siendo sometido a un proceso de negociación, pero el acuerdo será legalmente válido y se dará a conocer a todo el mundo y antes de firmarlo tendrá conocimiento la oposición", añadió.
Así, insta a los sevillanos a la "tranquilidad", porque "nada se hará contraviniendo la ley ni de espaldas a la oposición y a la opinión pública", y recuerda el trabajo que se está realizando para "evitar que se pierdan 4.000 empleos". "No quiero hablar de plazos, porque mi intención es que esto se resuelva cuanto antes y se está avanzando", señala, tras matizar que "defenderá el interés ciudadano con un rigor que en estos años no ha visto en la ciudad".
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