Zoido sospecha que la obra de Bueno Monreal generará más sobrecostes

El alcalde de Sevilla, Juan Ignacio Zoido, anunció ayer in situ que la construcción del paso subterráneo de Bueno Monreal ni tiene fecha fija de terminación ni garantías de que no vaya a seguir subiendo de precio. El alcalde dejó que se vieran los efectos de una obra que parece interminable (luz de obra, muros sin revestimientos) y los defectos de unas cuentas incontroladas (presupuesto que se dispara, modificado de 300.000 euros). El martes no tuvo reparos en lanzar un lamento en la sala de gobierno del Ayuntamiento. Sonó a suspiro: "¡Hay que ver lo que nos estamos encontrado en Movilidad..!" Y ayer se fue hasta una de las obras que mayores polémicas han generado en los últimos meses: el paso soterrado que cruza por la Avenida de la Palmera. Una obra que se presupuestó en 5,8 millones de euros con cargo a los fondos del Plan Proteja y que ya va por 2,8 millones más como consecuencia de las obras no contempladas en la previsión original.

Zoido no se atreve a dar una fecha de finalización de la obra. La unión temporal de empresas adjudicataria del proyecto formada entre las constructoras (Bruesa Construcción y Tecysu) espera entregar el próximo lunes la obra civil, pero la instalación del sistema de bombeo necesitará unos tres meses más de plazo una vez que sea adjudicada.

Como se trata de un proyecto promovido por el anterior gobierno municipal de PSOE e IU, Zoido precisó que cada día recibe nueva información sobre las obras y que en muchos momentos no sale de su "asombro". También destacó que pese a que la obra comenzó en otoño del año 2009, aún quedan los revestimientos interior y exterior, el alumbrado, el grupo de bombeo de aguas, la instalación de los semáforos y la barandillas de seguridad de la plataforma superior.

Zoido anunció que, al menos, el dinero aportado por la Junta de Andalucía para esta obra (los referidos 5,8 millones) "se ha salvado" al ser entregadas las certificaciones acreditativas correspondientes. El alcalde enumeró los desvíos presupuestarios que ha generado ya este polémico proyecto: 198.000 euros para la iluminación, 165.000 euros y 27.000 euros por la modificación del proyecto original para el desvío de un colector ovoide de la red pública de abastecimiento y saneamiento de agua, 192.000 euros en la contratación de trabajos de dirección facultativa, 300.000 euros para los revestimientos y 1,7 millones de euros y 240.000 euros en concepto de "facturas" entregadas por la Empresa Metropolitana de Abastecimiento y Saneamiento de Aguas (Emasesa) por hacerse cargo de las obras correspondientes a los servicios afectados. "Son gastos que no estaban previstos y tenemos que buscar el dinero para las modificaciones presupuestarias necesarias", aseveró Zoido, quien admitió que el Ayuntamiento tendrá que afrontar tales modificaciones presupuestarias: "Lo que hay que hacer es terminar cuanto antes este proyecto y ponerla en servicio".

Y justo cuando el alcalde abordaba la cuestión económica, lanzó un aviso: "Y no descarto que haya otro desvío presupuestario, habida cuenta de lo que nos hemos ido encontrando". A Zoido le "constan" también nuevos desvíos presupuestarios en el paso subterráneo que actualmente se construye entre la confluencia de la avenida de Andalucía y la Ronda del Tamarguillo, junto al centro comercial Los Arcos.

La UTE adjudicataria del proyecto defiende, según refirió el propio alcalde, que la obra esta técnicamente terminada y que, por lo tanto, el próximo lunes se recepcionará formalmente la infraestructura. Pero basta una visita para comprobar lo contrario.