Calle rioja
Francisco Correal
El filósofo de Cerro Muriano
Fiestas Mayores
Una situación más que previsible. La gala en la que se han concedido los nombramientos otorgados este año en la Velá de Santa ha estado marcada, en parte, por una protesta contra el Trianero Adoptivo, Javier Rodríguez, párroco de San Jacinto, al que los manifestantes acusan de haber alentado en agosto de 2022 la tala del centenario ficus que se sitúa a escasos metros de la fachada del templo. Los gritos en contra de dicha concesión han sido contestados por feligreses que apoyan al religioso.
Pancartas y gritos. La Velá de Santa Ana ha acabado este miércoles con la concesión de los nombramientos de honor. Una ceremonia que este año, como novedad, se ha celebrado el 26 de julio, festividad de la titular del templo principal del antiguo arrabal y a la que está dedicada esta fiesta mayor de la ciudad.
Entre los títulos otorgados se encuentra el de Trianero Adoptivo, que ha recaído en la persona de Javier Rodríguez, párroco de San Jacinto. Días antes de dicho acto, la Plataforma en Defensa del Ficus de San Jacinto recordaba el papel de este religioso en el intento de tala del centenario ejemplar, que pudo detenerse a última hora tras aceptar un juzgado las medidas cautelares solicitadas.
La citada plataforma mencionaba que esta tala salvaje provocó que de ella se hicieran eco medios de comunicación extranjeros. Por tal motivo, considera inoportuna la concesión del mencionado título. Esta oposición se ha evidenciado la noche de este miércoles en la protesta convocada por sus integrantes en la Plaza del Altozano, donde se ha desarrollado la gala con la que han concluido los días señalaítos.
Como recoge un vídeo de Triana Digital, publicado en las redes sociales, en el momento de la entrega del título, los miembros de la plataforma han comenzado a silbar y a protestar, alzando las pancartas. Entre ellas, había una en la que podía leerse: "Pá trianero, el ficus". Tal movilización ha sido contestada por feligreses de San Jacinto, que también han lanzado proclamas, pero a favor del párroco.
Una muestra de que, casi un año después, la división que provocó en Triana (y en toda Sevilla) el intento de tala del centenario ficus sigue latente. Un polémico asunto en el que no faltan quienes consideran que hay motivos para mantenerlo más allá de los puramente medioambientales. Mientras, este famoso ejemplar tiene ya sus brotes verdes, tras sobrevivir a aquella operación, respaldada en su día por el Ayuntamiento.
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