Urbanismo da licencia para acabar el acuario paralizado en 2008

El Ayuntamiento de Sevilla desbloqueó este miércoles la licencia para acabar el edificio a medio terminar del futuro acuario de Sevilla, cuyas obras se paralizaron en 2008 por los problemas económicos de la segunda concesionaria. Ahora hay una nueva empresa: la catalana Aliart Engineering, la tercera que se elige para llevar a cabo este ambicioso proyecto que arrancó en Sevilla en 1997, cuando Soledad Becerril ocupaba la Alcaldía en coalición con el andalucista Alejandro Rojas Marcos.

La comisión ejecutiva de la Gerencia de Urbanismo del Ayuntamiento de Sevilla aprobó conceder licencia de obra a la primera fase de la reforma parcial y terminación del edificio destinado al Acuario Público del Muelle de las Delicias. La autorización se otorga al proyecto presentado los pasados 29 de abril y 13 de junio de 2011.

La adjudicataria catalana se enteró este miércoles por la prensa de la aprobación de la licencia de obras, pero rechazó hacer valoraciones hasta tener constancia oficial de este trámite por parte de Urbanismo. Aliart prefiere ser prudente porque desde que se hizo con la adjudicación del acuario, en octubre de 2010, ha pasado demasiado tiempo (un año y cuatro meses) y se ha incumplido el calendario de plazos anunciado entonces a la prensa. Éste apuntaba a que las obras se retomarían a principios del año siguiente para concluir en la primavera de 2012. No ha sido así.

La primera fase de las obras recreará el ecosistema del estuario del Guadalquivir, las Marismas de Doñana y los arenales de Sanlúcar. Se describirán las características del tramo medio del río y la Vega de Sevilla, así como el protagonismo de Sevilla en la Historia del Descubrimiento. En el capítulo de las Marismas de Doñana la idea es la reproducción exterior transitable de uno de los parajes más valiosos y singulares de Europa, con menciones sobre su historia y gestión. Respecto a los Arenales de Sanlúcar, el acuario se centrará en el entorno submarino de los arenales móviles que dan paso al océano y fin del tramo fluvial.

En esta fase inicial también se explicará todo sobre el presente y futuro del bioma del Guadalquivir, es decir, sobre los ecosistemas característicos del estuario con vegetación y especies animales comunes. Los visitantes conocerán la fauna característica de los ambientes de ribera del Guadalquivir en acuaterrarios de detalle, en una sala de introducción para dar a conocer y descubrir las distintas especies que habitan en la ribera. Bosque de ribera con las especies vegetales propias de este hábitat en recesión, como olmos, álamos, alisos y fresnos, y la ampliación del hábitat para nutrias.

Sobre las Marismas de Doñana, habrá una reproducción exterior a gran escala, con vegetación natural autóctona y balsas de agua en equilibrio dinámico.

Otra zona detalla la Noche, un monográfico sobre la vida nocturna en Doñana, donde observar los animales nocturnos. Sobre los Arenales de Sanlúcar, con sus sistemas de bancos móviles y praderas de fanerógamas marinas.

Tercera concesionaria

La licencia de obras se ha otorgado a la tercera concesionaria que se encarga del acuario de Sevilla. Primero fue la británica Deep Sea Leisure, que se fue sin llegar a iniciar obras por los constantes trámites burocráticos con que se topó el proyecto.

Luego vino Acuario Nuevo Mundo. Empezó la obra en octubre de 2006 y levantó, con la constructora San José, el edificio actual hasta su abandono en 2008 por falta de dinero, tras la negativa europea a conceder subvenciones para esta obra. El Puerto de Sevilla rescató la concesión y volvió a sacarla a concurso.

La tercera empresa, Aliart Engineering, presentó a la prensa su proyecto a finales de 2010 a cargo de su director, Xabiert Aliart. La recreación de ecosistemas, todos ellos relacionados con el Descubrimiento de América, es su principal distinción con el resto de acuarios del país. Por eso el proyecto se denomina Acuario del Descubrimiento. La concesionaria asegura que hay instalaciones con similitudes en el extranjero: Alemania, Holanda y Canadá.

Con una inversión estimada de 11 millones de euros para todo el acuario, Aliart incluye en su proyecto un conjunto museográfico con detalles sobre el Descubrimiento de América y su vinculación con Sevilla. Una cafetería, una tienda de souvenirs, un auditorio para 250 personas y espacios expositivos completan el recinto. La idea es cobrar 14 euros y atraer a 600.000 personas al año.