Los veladores de la Avenida y San Fernando quedarán al mínimo antes de noviembre
Los técnicos de la Gerencia negocian con los hosteleros el número de mesas y sillas que desaparecerán tras la reordenación
La nueva estampa que presentarán la Avenida de la Constitución y la calle San Fernando tras la drástica reducción de veladores ya tiene fecha. La Gerencia de Urbanismo apunta que en noviembre será visible la reordenación de mesas y sillas en estas dos zonas turísticas de la ciudad. Las negociaciones entre los técnicos y los hosteleros siguen su curso. La semana que viene será clave. Otro paso previo ha sido la desestimación este miércoles en el consejo de gobierno de todas las solicitudes promovidas por los dueños de ocho establecimientos de esas dos céntricas vías.
“Los hosteleros han hecho los deberes”. Antonio Muñoz mostró su satisfacción por el acercamiento de postura con los propietarios de los negocios afectados, y desveló que, incluso, algunos han presentado una reordenación con menos mesas y sillas de las permitidas por la normativa. En el documento elaborado por los técnicos de la Gerencia aparece que la reducción en ambas zonas debe llegar a 100 mesas y 420 sillas con respecto a la cantidad actual, una cifra que “aún no es definitiva”. La propuesta de los empresarios llega a las 57 mesas y 253 sillas.
En la Avenida de la Constitución se reducirá un 60% de las licencias de veladores, así como una restricción del uso de elementos auxiliares. En este espacio se va a exigir también la presencia de separadores para el acotamiento y distinción de las terrazas siguiendo un modelo dado desde el propio Ayuntamiento. Sólo en la Avenida hay licencia para instalar un centenar de mesas y más de 350 sillas, aunque es evidente que en algunas horas del día y en determinadas fechas festivas la ocupación de la vía pública puede ser bastante mayor. Los trece locales de restauración de la Avenida cuentan con algún tipo de infracción.
Para la calle San Fernando se propone una reducción del 80% de las mesas y sillas. En la adopción de estas decisiones, la Gerencia argumenta la necesidad de una utilización racional de estos espacios, de manera que prime el uso común general por parte de todos los ciudadanos frente a los usos privativos y con la máxima del respeto a la existencia de un itinerario peatonal accesible y a la preservación de la accesibilidad universal.
La reordenación del espacio público no llegará por el momento a otras zonas de la ciudad como la Alameda de Hércules, el barrio de Santa Cruz o las calles Mateos Gago y Betis. “Hay un mejor comportamiento entre los hosteleros, han interpretado que la Gerencia va en serio con la reducción de veladores”, apuntó el concejal de Hábitat Urbano.
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