OBITUARIO
Muere Teresa Barrio, madre de Alberto Jiménez Becerril

La Unesco tratará en su reunión de Rusia el impacto de la Torre Cajasol

El organismo está aún a la espera de la documentación del Estado español.

Imagen de la Torre Cajasol tomada el pasado sábado desde el Aljarafe.
Luis Sánchez-Moliní

15 de mayo 2012 - 05:03

El Comité de Patrimonio Mundial de la Unesco tratará finalmente el posible impacto de la Torre Cajasol en su próxima reunión, que se celebrará entre el 24 de junio y el 6 de julio en San Petersburgo (Rusia).

El organismo que decide qué monumentos entran o salen de la lista de Patrimonio Mundial ya ha colgado en su página web la agenda provisional de la que será su trigésima sexta reunión en la ciudad rusa. En concreto, en el punto 88 del apartado dedicado al estado de conservación de los bienes inscritos en la Lista del Patrimonio Mundial aparece el caso del conjunto formado por el Real Alcázar, el Archivo de Indias y la Catedral, los tres monumentos de la ciudad hispalense que forman un solo expediente como Patrimonio Mundial, y que según la opinión del Consejo Internacional de Monumentos y Sitios (Icomos en su siglas en inglés) sufre una importante agresión por la construcción en el extremo sur de la isla de la Cartuja de un rascacielos de 148 metros diseñado por el arquitecto César Pelli y promovido por Cajasol.

Sin embargo, el punto dedicado a Sevilla no está desarrollado al igual que los otros que aparecen en el documento, porque se remite a una documentación complementaria que el Estado español aún tiene que aportar.

Por su parte, el profesor de la Universidad de Sevilla y miembro de la junta directiva del comité nacional Icomos España, Víctor Fernández Salinas, mostró ayer su satisfacción por la inclusión de Sevilla en las deliberaciones, pero dijo que para Icomos este extremo no supone ninguna sorpresa, ya que "era evidente que tenía que ser así. Lo que pasa es que siempre preferimos ser cautos y no dar nada por hecho".

8 Comentarios

Ver los Comentarios

También te puede interesar

Lo último

ENSEMBLE DIDEROT | CRÍTICA

Guerra y música en Berlín