La vida criminal del Tapón, la víctima del tiroteo de Torreblanca

La víctima del tiroteo registrado el pasado sábado en Torreblanca es José C. B., de 39 años, conocido con el sobrenombre del Tapón. Es uno de los delincuentes considerados más peligrosos de esta zona de Sevilla y en su historial acumula decena de detenciones por distintos motivos. Ha sido arrestado por cometer todo tipo de robos, atracos con armas de fuego, extorsiones y tráfico de drogas.

Pertenece a uno de los clanes más fuertes de Torreblanca, que se ha visto antes implicado en otros tiroteos ocurridos en la zona. Es una de las familias que impone su ley en el barrio a base de violencia y amenazas, y controla el negocio ilícito de las viviendas ocupadas. A veces se han cobrado deudas quedándose con los pisos y coches de los deudores.

A mediados de los años dos mil, el Tapón formó parte de una de banda de atracadores muy violenta. En junio de 2007, la Policía Nacional lo detuvo por su participación en varios robos a mano armada, junto con otros jóvenes de Torreblanca. Se le imputaron entonces varios robos. El primero fue el 21 de mayo de ese año en un bar de la calle Umbrete, donde la banda reventó la caja registradora con una machota y se llevó 700 euros.

Dos días después, robaron en un concesionario del polígono El Pino, donde tres atracadores entraron con un pasamontañas y amenazaron a un empleado con pistolas. Lo obligaron a ponerse de rodillas y decirle dónde estaba el dinero. Sin embargo, no lograron nada porque el establecimiento acababa de abrir y no había efectivo aún. Frustrados, entraron en otro bar de la calle Torrearcas, donde forzaron una máquina tragaperras.

Los investigadores averiguaron luego que la banda había perpetrado más atracos antes. Uno de ellos fue en una pastelería en la que había trabajado antes uno de los socios del Tapón en la banda de atracadores. La Policía destacó entonces la preparación de los robos, pues los autores captaban información previa del establecimiento y buscaban la colaboración de empleados desleales.

En diciembre de ese mismo año, estuvo entre los tres detenidos por un caso de extorsión en Torreblanca. Exigían dinero a un joven del barrio y le pegaban si no se lo entregaba.

Al año siguiente, en junio de 2008, el Tapón volvería a ser arrestado por otros tres atracos a mano armada en Torreblanca. Actuaba con al menos dos cómplices, uno de los cuales se quedaba en la puerta del negocio mientras que él y otro más accedían al interior con los rostros cubiertos por pasamontañas y guantes en las manos.

Uno de los sospechosos portaba una escopeta de cañones recortados, con la que disparaba al techo para intimidar a las personas que ese encontraban en el interior de los establecimientos, mientras que los restantes robaban el dinero de la caja. Luego se daban a la fuga a bordo de ciclomotores. Se les imputaron tres robos, dos en bares y uno en una gasolinera. José C. B. se personó voluntariamente en la Jefatura Superior de Policía después de que fuera identificado por el Grupo de Atracos.

Tras un paso por prisión, en el verano de 2009 fue detenido, junto con varios familiares, en una operación contra el tráfico de drogas a mediana escala en Torreblanca.

Dos años más tarde, en agosto de 2011, cayó por un robo con violencia cometido en una zona de botellona de Mairena del Alcor. En compañía de otro delincuente, al Tapón se le imputó una agresión a un joven, al que atacaron con un cuchillo de cocina de grandes dimensiones y con la barra de una sombrilla de playa, para robarle una cadena de oro. La víctima tuvo que ser trasladada al hospital e intervenida quirúrgicamente. Los autores fueron detenidos después de darse a la fuga en un vehículo.

José C. B. fue tiroteado cuando iba al volante de su coche, un Peugeot, a mediodía del pasado sábado. A plena luz del día y en una de las avenidas principales del barrio, la calle Torrelaguna, un hombre abrió fuego con una escopeta contra el Tapón, que quedó malherido. Le dio al menos siete tiros. Fue atendido in situ por los servicios de emergencias sanitarias del 061 y trasladado al Hospital Virgen del Rocío, donde permanece en estado crítico.

El Grupo de Homicidios de la Policía Nacional mantiene abierta una investigación sobre los hechos. La Policía Científica hizo una inspección ocular en el lugar de los hechos y recogió las distintas evidencias del tiroteo. Por el momento no hay ninguna persona detenida por su relación con esta agresión.

Los agentes investigan también si dos incendios ocurridos en la calle TorremanzanaTorremanzana la noche del sábado tienen relación con el tiroteo. Unos desconocidos arrojaron sendos cócteles molotov al interior de las viviendas. Ninguna persona resultó herida, si bien los Bomberos tuvieron que acudir para apagar las llamas.