El TSJA da hasta el día 29 para consensuar la ejecución de la sentencia del Prado

La Universidad de Sevilla tienen hasta el próximo día 29 para convencer a los vecinos del Prado que se respete lo máximo posible de lo ya construido de lo que iba a ser la Biblioteca Central de la Hispalense, proyecto desechado finalmente por la Justicia.

En un auto notificado a las partes el pasado 9 de mayo, la sección segunda de la Sala de lo Contencioso Administrativo del Tribunal Superior de Justicia de Andalucía (TSJA) suspende durante 15 días hábiles la ejecución de la sentencia que obliga a la Hispalense a restituir la realidad anterior al inicio de las obras del proyecto firmado por la arquitecto anglo-iraquí Zaha Hadid, el cual ha protagonizado en los últimos años una de las polémicas más sonadas de la ciudad. Eso sí, el posible acuerdo al que lleguen las partes nunca puede ir contra el espíritu de la sentencia. Es decir, la biblioteca no se puede construir.

El objetivo del auto del TSJA, firmado por Antonio Moreno Andrade, Eduardo Herrero Casanova y José Santos Gómez, es darle una oportunidad a la Universidad de Sevilla (solicitante de la medida) para que consensúe con la parte demandante (los vecinos) la ejecución de la sentencia. Según le consta a este periódico, en los últimos día, los abogados de la Hispalense ya han tratado el asunto con los abogados de los vecinos. Sin embargo, y según recalcó ayer el presidente de la comunidad de vecinos del edificio Diego de Riaño 9, José Cubiles, todavía no se ha llegado a ningún acuerdo.

La Universidad de Sevilla, como ha repetido hasta la saciedad su rector, Antonio Ramírez de Arellano, intenta por todos los medios salvar la inversión pública de 6 millones de euros. Sobre todo, quiere que se respete el parking subterráneo ya realizado con plazas para 80 vehículos. También se podría intentar salvar algunas estructuras ya realizadas y que se podrían dedicar al negocio de la restauración.

Sin embargo, hasta la fecha, los vecinos no han sido muy receptivos a este tipo de propuestas y todo dependerá de la evolución de las negociaciones que se están llevando a cabo. La Universidad de Sevilla ya ha iniciado la construcción de su Biblioteca Central con otro proyecto arquitectónico en unos terrenos en Eritaña.