Solidaridad alega que el taxista detenido es granjero

Sevilla/La asociación Solidaridad Hispalense del Taxi ha manifestado este martes su respeto al reciente registro policial de su sede del aeropuerto de Sevilla, avisando no obstante de que "las prisas no pueden precipitar a errores" y "en esta ocasión se vuelven a equivocar". Así, el colectivo se ha desligado una vez más de los ataques denunciados por los conductores de vehículos con licencia de transporte concertado.

A través de un comunicado, Solidaridad Hispalense del Taxi ha manifestado su "respeto por cualquier actuación judicial tendente al esclarecimiento de cualquier hecho". El mencionado registro fue acometido por la Brigada de Información de la Policía Nacional, que investiga ya a 28 taxistas por presuntas coacciones y amenazas a otros taxistas y a conductores de vehículos con licencia de transporte concertado (VTC), con relación a los trayectos al aeropuerto, cuya parada estaría supuestamente acaparada por un grupo concreto de taxistas.

El registro contaba con un mandamiento del juzgado de guardia en Sevilla el pasado domingo y se saldó con el decomiso de discos duros y material informático para su análisis, así como con la detención de un taxista de 59 años de edad cuya identidad responde a las iniciales A.M.C.V. Y es que al registrar los agentes los taxis que se encontraban en la zona del Palenque del aeropuerto de San Pablo, en el vehículo de este hombre habrían sido descubiertos un punzón, jeringuillas, una capucha y huevos, tratándose según la Policía Nacional de efectos como los usados en los múltiples ataques denunciados por los conductores con licencia para vehículos de transporte concertado.

"Colaboración" con la Policía

Después de que el mencionado taxista quedase en libertad con cargos, ya como investigado número 28 en las mencionadas pesquisas del Cuerpo Nacional de Policía, Solidaridad Hispalense del Taxi ha defendido que los taxistas presentes en las instalaciones de la organización en el aeropuerto de Sevilla "colaboraron en la medida de lo posible" con los agentes encargados del mencionado registro, "lo que no fue óbice para que al no disponer (los taxistas) de algunas llaves, la Policía forzara puertas y cajones" durante dicho registro.

Solidaridad Hispalense del Taxi, en ese sentido, ha corroborado que los agentes "se llevaron algún ordenador e incluso objetos de carácter puramente personal", en alusión a un dispositivo de almacenamiento de datos que contendría las imágenes de la "boda" de uno de los miembros de la asociación. En ese sentido, el colectivo advierte de que aunque "al parecer el juzgado" que ordenaba el registro "determinaba" la extracción de "copias" de la información susceptible de ser analizada, los agentes "no hicieron copias" y decomisaron directamente los materiales.

En cuanto al taxista detenido durante el registro, Solidaridad Hispalense ha expuesto los motivos por los cuales fueron localizados en su vehículo un punzón, jeringuillas, una capucha y huevos.

Según el colectivo, se trata de un taxista que "habitualmente lleva huevos perfectamente embalados, ya que vive en una zona de campo donde tiene varios animales de granja y utiliza los huevos para hacer trueque con cualquier otro compañero que se lo solicite", toda vez que "la jeringuilla contiene aceite de motor para el engrase de los elementos del coche" y el aludido punzón sería "un destornillador de bola plana, algo absolutamente normal en un vehículo". "Es un buen profesional y una buena persona", defiende la asociación respecto a A.M.C.V.

"Se vuelven a equivocar"

"Esta asociación es la más interesada en el esclarecimiento de estos hechos de una vez, pero las prisas no pueden precipitar a errores y creemos firmemente que en esta ocasión, se vuelven a equivocar", expone el colectivo, señalando que el sector del taxi "está luchando para que todos puedan trabajar, pero con el respeto escrupuloso a su cuadro normativo".

Y es que según Solidaridad Hispalense del Taxi, los conductores de vehículos de transporte concertado que operan para empresas de alquiler de coches con chófer como Cabify "en ocasiones" incurren en actuaciones "ilícitas e ilegítimas", en referencia a los supuestos casos de intrusismo o competencia desleal que los taxistas achacan a los conductores de VTC.

"Pedimos a nuestros compañeros la máxima tranquilidad, con la seguridad de que desde las asociaciones, ejerceremos nuestros derechos y no nos vamos a rendir ante denuncias falsas y distintos métodos de presión", concluye Solidaridad Hispalense del Taxi.