Sevilla es la primera gran capital en aprobar la emergencia climática

Sevilla/A propuesta de Adelante Sevilla, la ciudad ha aprobado este jueves la declaración del estado de “emergencia climática y ecológica” con el apoyo de todos los grupos políticos, salvo Vox que votó en contra. La propuesta salió adelante en el primer pleno ordinario del segundo mandato del socialista Juan Espadas y supone que Sevilla es la primera gran capital española que declara una medida a la que ya se han sumado en España otras comunidades autónomas como Cataluña y otros municipios, y en el mundo grandes territorios como Nueva York, San Francisco, Sidney, Reino Unido, París o Amsterdam.

Esta declaración está en la línea con el compromiso firmado por el alcalde Juan Espadas, que preside la Red de Ciudades por el Clima, de “reducir para el año 2030 un 40%, como mínimo, las emisiones de CO2 (dióxido de carbono) y a aumentar la resistencia de la ciudad a los impactos del cambio climático”. Los científicos han advertido que hay que actuar antes de 2030 para frenar los peores efectos del cambio climático y ampliar nuestros espacios sostenibles.

La Universidad de Sevilla apoya plenamente la declaración de emergencia climática. La moción de Adelante ha sido elaborada con la colaboración de Equo y Ecologistas en Acción y con el apoyo de los jóvenes de Fridays For Future, que cada viernes han pedido en el pleno que se aprobara esta medida.

Susana Serrano, portavoz de Adelante Sevilla, agradeció el apoyo a todas las entidades y apeló al resto de los grupos políticos de la ciudad “para que Sevilla no se quede atrás” y explicó que la emergencia climática suponer “ponerse manos a la obra para hacer frente desde lo local a una amenaza global que pone en riesgo la vida misma”.

Serrano pidió al alcalde que esta declaración no sea simbólica “sino un primer paso para poner en marcha las políticas que la actual crisis climática y la gente nos está reclamando”. Y lamentó que la moción original recogía un completo programa de medidas que han sido excluidas del documento final como consecuencia del nuevo reglamento de funcionamiento del pleno, pero que “serán caballo de batalla de la confluencia progresista en los próximos plenos”.

Entre esas medidas Adelante batallará por la prohibición del tráfico rodado en el casco antiguo para los no residentes, recuperando así el Plan Centro, precedente de Madrid Central.

El delegado de Transición Ecológica, David Guevara, aclaró que la ciudad “no parte de cero” ante este “reto global” y destacó las actuaciones que se han llevado a cabo. Según sus datos, desde 2015 se ha reducido un millón de toneladas de CO2 en Sevilla, hasta las 1.951.000, un 38% menos.

El concejal de Cs Miguél Ángel Aumesquet criticó el “atraso” de Sevilla en políticas preventivas, afirmando que está “en una inmensa crisis climática”.

El edil de Vox Gonzalo García Polavieja consideró que declarar el estado de emergencia climática “es algo simbólico” por lo que opina que una Administración pública no debe declararlo. “Es una extravagancia”, dijo y Serrano le recordó que el Papa también lo ha declarado.

La moción aprobada prevé la puesta en marcha de una campaña informativa para que la ciudadanía sepa las consecuencias de la situación climática que ya se vive y el desarrollo de un amplio proceso de participación, con expertos, asambleas ciudadanas y foros técnicos, para elaborar un “nuevo y más ambicioso” Plan de Acción por el Clima y la Energía Sostenible (Paces) que impulse el autoconsumo de energía renovables con ayudas para paneles solares, un plan de residuos cero, apuesta por la agroecología y “renaturalización” de la ciudad.

Moción verde del PP

El Pleno ha aprobado por unanimidad una propuesta de PP para que el Ayuntamiento realice un plan de choque contra los efectos del cambio climático con actuaciones en favor del arbolado y zonas verdes, con planes de empleo para el refuerzo de las labores de la plantilla del Servicio de Parques y Jardines, más arbolado y más inspecciones.

La concejal Evelia Rincón del PP consideró que Sevilla “no puede esperar más a los inventos de un alcalde que presenta la capital como ciudad verde pero después deja morir los árboles”, apuntando a su “nula gestión” en este ámbito. “Más de 4.000 árboles talados y parques abandonados”, recalca.