Sevilla es la provincia de España en la que más sube el desempleo en marzo: 31.813 parados más
Crisis del coronavirus en Sevilla
La provincia retrocede de golpe años de avances: se queda con 225.282 desempleados tras la mayor subida del paro de la historia
En afiliación el dato no es tan malo: son 16.496 cotizantes meno de media en marzo, ya que la primera mitad del mes sí fue buena
La capital suma 10.018 nuevos parados
Marzo deja en la provincia de Sevilla 31.813 parados más respecto a febrero (+16,44%), hasta 225.282, un incremento insólito y espectacular motivado por el cierre y la ralentización de miles de empresas por las medidas adoptadas por el Gobierno para frenar la crisis sanitaria del coronavirus. Ni que decir tiene que la subida es la mayor de la historia y supera con mucho, en más del triple, a los 9.527 que se registraron en octubre de 2009, que era el récord hasta hoy.
Además, Sevilla es la provincia de España donde más sube el paro, en un contexto en el que el país suma 302.265 parados. Esto es atribuible, además de a la práctica parálisis de la economía, a que en Sevilla muchos trabajadores se han quedado 'colgados' justo en el momento en que se estaban produciendo las contrataciones de cara a Semana Santa y, en el caso de la capital, la Feria de Abril. Pero también, según informa la Consejería de Empleo, a que Andalucía es de las pocas autonomías que ha pedido a los afectados por ERTE (Expedientes de Regulación Temporal de Empleo) que se "inscriban o reinscriban como demandantes de empleo mientras este colectivo no sea clasificado correctamente".
Esto quiere decir que, para agilizar las prestaciones y debido al volumen de ERTE recibidos, Andalucía no diferencia entre afectados por ERTE o no en la inscripción o renovación telemática de la demanda de empleo. Pero en próximas fechas los parados afectados por ERTE no se incluirán en la estadística de paro registrado, sino en la de Denos (demandantes de emleo no ocupados) como sucede con los trabajadores agrarios subsidiados, los estudiantes, aquellos que buscan un empleo puntual o los que quieren un trabajo inferior a 20 horas al mes. Esto, seguramente, reducirá el paro registrado en abril, ya que los afectados por ERTE no entrarán en la estadística.
Al no desglosar, de momento, entre afectados por ERTE y despedidos, no sabemos cuántos de los nuevos parados volverán a una situación de empleo cuando acabe el estado de alarma y cuántos se consolidan.
En términos interanuales (entre marzo de 2018 y marzo de 2019) la provincia suma 31.614 parados más y hay que remontarse a noviembre de 2012 para encontrar un alza superior, de 31.736. Es la primera vez que sube el paro en tasa interanual, además, desde agosto de 2013.
En cuanto a la afiliación a la Seguridad Social, la provincia registra 16.496 cotizantes menos, hasta 728.888, un dato que no es tan malo como el del paro entre otras cosas porque se calcula con la media del mes (el desempleo se contabiliza el último día) y al menos la primera mitad de marzo sí fue buena. La segunda fue un absoluto desastre, tal y como indica la evolución de la afiliación diaria: Sevilla perdió 50.439 empleos entre el 11 de marzo y el 31 y fue, tras Madrid, Barcelona y Asturias, la tercera provincia con peor comportamiento en términos absolutos. En porcentaje, la caída, de un 6,74%, es la más acusada tras las de Cádiz, Málaga y Alicante.
En cualquier caso, es el peor mes de la historia, superando incluso al fatídico enero de 2012, cuando se registraron 14.484 parados menos.
La provincia destruye ya empleo en el plazo de un año, aunque aún poco: 5.332 personas afiliadas menos,. Pero este dato es engañoso: es seguro que a día de hoy ya hay mucha más destrucción de empleo real y que en abril esto se reflejara de forma muy cruda, tal y como se está comprobando la evolución diaria de la afiliación. En cualquier caso, estamos ante la primera vez que se destruye empleo desde febrero de 2014 en un año, y el mayor retroceso desde noviembre de 2013.
En términos absolutos, los 225.282 parados que contabiliza Sevilla suponen un retroceso de cuatro años, hasta julio de 2016, primera fecha en la que encontramos una cifra superior; y en cuanto a la afiliación (728.888) hay que remontarse a más de dos años atrás, septiembre de 2018, para encontrar un dato peor.
La evolución por sectores
Por sectores, los datos abruman en industria, construcción y servicios. La agricultura, sector esencial, aumenta el paro en 520 personas, lo cual no es ni mucho menos escandaloso. Sí lo es el alza en industria, con 2.338 más (+18,3%), construcción, con 7.715 más (nada menos que un 44% más), y servicios, con 20.530, un 15,63% mas.
En cuanto a la afiliación a la Seguridad Social, el régimen agrario pierde 875 cotizantes, que es una cifra considerable pero no alarmante. Y es muy sorprendente que los autónomos se reduzcan sólo en 202 personas, lo cual puede ser debido a que han decidido no cesar en su actividad pese a estar parado o a que si lo han hecho aún no han sido de baja del sistema.
El régimen general, que agrupa al resto de actividades, acumula el grueso de la caída de la afiliación, con 15.170 afiliados menos.
Diez mil parados más en la capital
La capital también sufre un duro batacazo. Aproximadamente un tercio de la subida del paro corresponde a la metrópoli, que suma 10.018 nuevos desempleados, hasta 79.080. En términos anuales, se da la vuelta al descenso que se registraba en febrero respecto al ejercicio anterior y ahora hay 8.803 parados más entre marzo de 2019 y marzo de 2020.
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