"Sevilla fue el lugar idóneo para un proyecto ambicioso"
25 aniversario de la expo 92
El rey emérito Juan Carlos I destaca que la capital hispalense proyectó en la Expo 92 la más amplia y rica representación de la cultura española.
Felipe González recuerda que la exposición fue un ejemplo de lo que el país es capaz de hacer "desde la concordia".
Sevilla/Hace 25 años, la isla de la Cartuja abría sus puertas al mundo. Más de 41 millones de personas visitaron la Exposición Universal de 1992, evento que contó con la participación de 108 países, 23 organizaciones internacionales y 17 comunidades autónomas. “Se duplicaron las expectativas más optimistas”, ha destacado esta mañana Julio Cuesta, comisario de los actos de conmemoración de este 25 aniversario, en la celebración del acto institucional celebrado en los Reales Alcázares de Sevilla.
Numerosos representantes de la vida política, empresarial y académica de la ciudad han participado en este acto que ha estado presidido por los Reyes eméritos. Estos han estado acompañados por la presidenta de la Junta de Andalucía, Susana Díaz; el ministro de Interior y ex alcalde de la ciudad, Juan Ignacio Zoido; el actual regidor de Sevilla, Juan Espadas; y el ex presidente del Gobierno Felipe González. El acto, de una hora de duración, ha destacado por su marcado carácter protocolario y discursos llenos de elogios a aquellos que hicieron posible la muestra pero con una total ausencia de anécdotas y recuerdos de sus protagonistas.
La Expo 92 “puso de relieve en todo el mundo el empuje de una España segura de sí misma y comprometida con el futuro”, ha manifestado el rey Juan Carlos durante su discurso, que no dudó, al igual que todos los oradores, en recordar el papel que jugó Jacinto Pellón, responsable de la construcción, organización y gestión de la Expo, y que falleció en 2006. Don Juan Carlos ha defendido que la Exposición Universal fue "un proyecto ambicioso", acometido "en el lugar idóneo", aseverando que la ciudad y España en su conjunto estuvieron "a la altura del desafío".
Felipe González: "El cambio no debe acabar"
Felipe González, por su parte, ha asegurado que aquella celebración "marcó un antes y un después" tanto en el ámbito público como en el de la iniciativa privada y, con ironía no exenta de cariño, se ha referido al “espíritu sevillano” y al sentimiento escepticismo con que fue acogido el proyecto en un primer momento por los ciudadanos, asegurando que es ahora cuando los sevillanos “están convencidos de que hubo una Expo Universal hace 25 años”.
González ha asegurado que "el cambio no debe acabar" y que "nada es insuperable; al contrario, tenemos más materia prima que nunca" y ha alentado a seguir superando retos "sin resignación ni rencor". El ex presidente también ha llamado a "superar cualquier sectarismo para no volver atrás" y ha añadido que, si la Expo 92 fue "una fantástica excusa para poner en marcha una nueva dirección, ahora no necesitamos excusas, porque tenemos un país moderno". No obstante, ha advertido de que modernizar un país es como ir en bicicleta, "siempre pedaleando" y una tarea que no admite la resignación y que debe acometerse "desde el espíritu de servicio público y desde la concordia".
Díaz también ha destacado que aquella celebración fuese “la puerta de entrada de Andalucía a la modernidad” y “un ejemplo de diálogo, convivencia y respeto; una apuesta por la paz y el desarrollo colectivo de los pueblos" y ha asegurado que el reto ahora es construir un "nuevo modelo de economía sostenible y respetuoso con las personas”.
El alcalde de Sevilla, como fruto de la Expo 92, ha destacado el parque tecnológico que existe en sus terrenos, con 400 empresas, 16.000 trabajadores y 2.000 millones de euros de facturación anuales -y 57 patentes sólo en 2015. Juan Ignacio Zoido ha citado a don Juan Carlos y Felipe González como principales impulsores de la muestra y ha citado las palabras de Ortega: "Para progresar hay que pensar en grande, y para avanzar hay que mirar lejos".
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