Málaga alcanzará a Sevilla en población dentro de 15 años
Demografía
El empuje de la inmigración será fundamental para que la provincia sevillana roce los dos millones de personas
Por contra, los habitantes con nacionalidad española disminuirán en 45.000 para 2037
El desplome de la natalidad en Sevilla: 2.000 niños menos en seis años
Sevilla y Málaga quedarán casi empatadas en población dentro de 15 años. Las dos provincias se disputarán la hegemonía andaluza en número de habitantes en 2037. Ambas crecerán en el padrón, pero lo harán gracias al empuje de la inmigración que llegará a sus municipios, ya que en el caso de Sevilla la población autóctona descenderá en este periodo, mientras que en la malagueña sí se registrará en este segmento cierto repunte, aunque alejado en cifras del que experimentarán los extranjeros. Una tendencia que se reflejará en toda Andalucía.
La población de la provincia de Sevilla tendrá un crecimiento moderado en los próximos tres lustros. Así lo avalan los datos de la proyección publicada por el Instituto Nacional de Estadística (INE). En total, sumará 37.426 habitantes, para pasar de los 1.960.257 actuales (cifra de 2022) a los 1.997.683 que habrá en 2037. Este aumento, al menos, alejará el signo negativo que se viene registrando en ejercicios pasados. De hecho, en el último padrón (facilitado a finales del año pasado), la provincia había perdido 2.367 vecinos.
¿Cuándo se cambiará este signo? Según la proyección del INE, a partir de 2023, cuando la provincia gane 5.000 habitantes y, así, sucesivamente. A excepción de Córdoba y Jaén, toda Andalucía incrementará su población. Especial mención requiere Málaga, que casi empatará en empadronados con Sevilla. De este modo, y según las previsiones del ente estatal, de los 1.711.693 personas que viven este año en la provincia donde se encuentra la Costa del Sol, se pasará en 2037 a 1.994.303. Es decir, 282.610 habitantes más. Por tanto, el crecimento sevillano apenas representa un 13% del incremento poblacional que tendrá Málaga.
La llegada de extranjeros
Un factor resulta determinante en ambos aumentos: la inmigración. En Sevilla, por ejemplo, el número de extranjeros empadronados en 2022 alcanza los 120.694. Pues bien, en 2037 tal cifra llegará a los 202.275, o lo que es lo mismo, 81.587 más, lo que porcentualmente se traduce en una subida nada baladí del 67%. La provincia seguirá siendo una tierra de oportunidades para los que vienen de fuera. Caso contrario es el de la población autóctona (con nacionalidad española), que durante este tiempo mermará. Si este año dicho colectivo lo integran 1.893.562 personas, en década y media se quedará en 1.795.407, esto es, 44.155 autóctonos menos: una reducción del 2,4%.
El fenómeno de la inmigración adquiere aún mayor peso en el caso de la provincia malagueña. Para 2037, habrá 245.741 extranjeros más empadronados en sus municipios, la mayoría de ellos en la Costa del Sol. Una cifra que triplica el incremento que experimentarán los inmigrantes en Sevilla. En el caso de Málaga, además, la población autóctona no retrocede, sino que crece, aunque en cifras bastante alejadas de los habitantes no nativos: 36.870 personas más. Tal cantidad supone una subida del 2,72% frente a la pérdida del 2,4% en Sevilla.
Las tendencias demográficas previstas en ambas provincias se pueden extrapolar a toda Andalucía. La región cuenta actualmente con 8,5 millones de habitantes. En 15 años esta cantidad superará los nueve millones. En este incremento la población inmnigrante resulta clave. De los 928.297 extranjeros empadronados en 2022 se pasará a los 1.564.113 en 2037. Por tanto, habrá 635.816 más en la comunidad autónoma. Por contra, las cifras de andaluces autóctonos seguirán a la baja, con 148.000 personas menos.
Más muertes que nacimientos
Varios factores inciden en estos cambios. Uno de ellos es la natalidad. Los últimos datos que conciernen al primer semestre de 2022 reflejaron que en seis años el número de nacimientos se había reducido en la provincia de Sevilla en 2.000. Una inquietante merma que tiene sus primeros efectos en la educación, con una más que importante bajada en la escolarización. De hecho, este curso más de 11.000 plazas de guarderías se han quedado sin cubrir por la falta de demanda. A este respecto y atendiendo a los indicadores de proyección, el INE vaticina un pequeño incremento en los nacimientos para 2036. Si en 2022 la cifra es de 15.359 alumbramientos en la provincia sevillana, dentro de 15 años se llegará a los 16.754. Se trata, en todo caso, de un leve repunte que no resarce la merma de la natalidad de los últimos ejercicios. Por tanto, la tendencia de los nacimientos cambiará a positiva, pero no lo suficiente para revertir años continuados de bajada.
Frente a los alumbramientos, las defunciones. La prospección para 2022 fija este indicador en 17.302 para la provincia. Pues bien, en 2036 serán 19.653, por lo que el número de muertes continuará estando por encima de los nacimientos, lo que conlleva un saldo vegetativo negativo. Este hecho impide que el crecimiento poblacional de Sevilla resulte mayor en los próximos 15 años. A ello hay que añadir los flujos migratorios, claves en los comportamientos poblacionales. Especial mención requiere aquí el número de sevillanos que se desplazará a otras provincias españolas. Así, de los 15.989 actuales se llegará a los 17.299 en el periodo analizado. Por contra, los que vendrán de otras zonas del territorio nacional seguirán siendo menos: de 15.066 a 15.882.
De todas estas cifras se deduce que Sevilla tendrá un crecimiento poblacional moderado en década y media, gracias sobre todo a la inmigración. Su poder de atracción, no obstante, será menor que el de Málaga e, incluso, que el de Almería, que ganará 110.000 habitantes en este tiempo. Dos provincias costeras con gran número de oportunidades para los extranjeros. Debe destacarse en el caso de la malagueña su importante potencial empresarial (se ha convertido en sede de grandes compañías internacionales) y del sector agroalimientario en la almeriense.
Un crecimiento poco disperso
En el crecimiento demográfico de la provincia de Sevilla debe tenerse en cuenta, además, que no será homogéneo. Todo hace prever que se concentre en el área metropolitana, mientras que zonas como la Sierra Norte (ahora llamada Sierra Morena) sigan sufriendo los efectos de la España vacía, con la sangría despoblacional. Ha de mencionarse en este contexto el caso de Dos Hermanas, el municipio sevillano que mayor aumento de habitantes ha experimentado los últimos ejercicios. En el padrón más reciente ganó 1.200 vecinos frente a los 7.000 que había perdido la capital hispalense, que ha retrocedido a niveles poblacionales de la Expo 92.
Las proyecciones de población del INE proporcionan una simulación de la población que residiría en España para los próximos años, desagregada según características demográficas básicas. Parten de la estimación de la población a 1 de enero del año en curso. Dicho estudio responde a la necesidad de disponer de una perspectiva de la posible realidad demográfica futura, actualizada según la evolución más reciente.
También te puede interesar
Lo último
Contenido ofrecido por Alhambra
Contenido ofrecido por INDI & COLD