Sevilla incorporará la Isla de la Cartuja a las visitas turísticas 30 años después de la Expo92

Han pasado casi treinta años de la Exposición Universal de 1992 y es ahora, tras una pandemia del coronavirus que ha generado una crisis económica, cuando las administraciones local y andaluza se han propuesto que la isla de la Cartuja forme parte también del atractivo turístico de Sevilla capital, con vistas a dar a conocer la potencia que tiene el enclave de investigación, de innovación y de empresas que ya es el Parque Científico y Tecnológico de la isla (PCT Cartuja), y la cantidad de espacios culturales y edificios de valor que contiene.

Para que este objetivo se cumpla el Ayuntamiento de Sevilla y la Junta de Andalucía van a destinar a la Cartuja un porcentaje de las inversiones previstas en el Plan Turístico de Grandes Ciudades de Sevilla (dotado 5 millones de euros, de los cuales un 65% son inversiones), se ha incluido la isla en la promoción de la nueva marca ciudad de Sevilla con el mensaje de que "Sevilla también es una ciudad para invertir" y se ha creado un grupo de trabajo con los empresarios de la Cartuja para definir iniciativas que se puedan ejecutar en esta dirección.

Esta iniciativa se ha presentado, en un acto en el CaixaForum de Sevilla, por parte de Turismo del Ayuntamiento de Sevilla (el delegado Antonio Muñoz y su director gerente Antonio Jiménez), el Parque Científico y Tecnológico Cartuja (su director Luis Pérez Díaz) y el Círculo de Empresarios de Cartuja (que preside Beltrán Calvo).

Los detalles de cómo va a ser la incorporación de la Cartuja a las rutas turísticas de Sevilla deben definirse en el grupo de trabajo creado con los empresarios, que tendrán que concretar la señalización, los espacios de mayor interés de la isla y ver si se reserva un espacio para mostrar lo que fue la Expo92, según explicó en el acto el delegado municipal Antonio Muñoz.

El edil recalcó que la Cartuja cuenta en la actualidad con todos los ingredientes que hacen falta para ser un espacio turístico: hoteles, hostelería (la isla acoge la Escuela Superior de Hostelería de Sevilla), museos (el Monasterio de la Cartuja que acoge el Centro de Arte Contemporáneo CAAC), instituciones culturales potentes (CaixaForum), pabellones culturales (Pabellón de la Navegación, Pabellón del Futuro y todos los de la Expo92), comercio (restaurantes y bares de la isla y el centro comercial Torre Sevilla), miradores (Torre Schindler y los puentes de la isla), un parque de ocio (Isla Mágica) e incluso auditorios para congresos.

Acabar con los jaramagos

Uno de los retos para que la Cartuja pueda acoger visitas turísticas es acabar con los jaramagos y el abandono que aún sufren algunos espacios de la isla, sobre todo las avenidas exteriores que circundan el parque tecnológico: la avenida de los Descubrimientos (con el canal de la Expo) y la avenida Marie Curie. Esta fue la principal queja del presidente de los empresarios de Cartuja Beltrán Calvo, además de lamentar la desconexión histórica que ha tenido la isla respecto a la ciudad.

"Espadas se ha volcado en la Cartuja pero hay que desterrar los famosos jaramagos que hay en la avenida Marie Curie y la avenida de los Descubrimientos que dan una imagen de descuido a los visitantes", recalcó Calvo. "Debemos conseguir que la Cartuja aporte mucho a la ciudad, como aporta Manhattan en Nueva York o la City en Londres; hay que poner los recursos y desarrollarlo".

"El Parque Científico y Tecnológico Cartuja se conoce hace 27 años por su actividad y hemos crecido un 4% en 2020, en plena pandemia, pero los empresarios siempre hemos visto que la isla está desconectada de la ciudad", lamentó Calvo.

El presidente de los empresarios abundó también en la buena oferta cultural con la que cuenta la Cartuja y que puede complementar muy bien la actividad científica que se desarrolla en su recinto tecnológico (PCT Cartuja).

Desde el Ayuntamiento, el delegado de Turismo Antonio Muñoz, que también es concejal de Hábitat Urbano, admitió las mejoras que requieren algunos espacios públicos de la Cartuja y respondió que estas mejoras se pueden abordar con los 10 millones de euros con que se ha dotado el nuevo contrato de conservación del viario para toda la ciudad. "El Ayuntamiento destinaba antes 3 millones a la conservación del espacio público y ahora destina 10 millones. Soy optimista (en el sentido) de que alguna acera más podremos arreglar para corregir" lo que necesita la Cartuja, afirmó el concejal socialista.

Muñoz dejó claro que el Plan Turístico de Grandes Ciudades de Sevilla no se ocupa de esta cuestión de las reformas que requieren algunas zonas de la Cartuja. Y recordó algunos cambios que están en marcha en la Cartuja:

• Reurbanización y transformación urbana sostenible (proyecto Cartuja Qnat) en la calle Thomas Alva Edison: 5 millones de euros.
• Nueva sede de Joint Research Center de la Comisión Europea en la parcela municipal del antiguo Pabellón de los Descubrimientos. Está en proceso de concurso internacional de arquitectura.
• El proyecto #Ecity Sevilla para convertir el Parque Tecnológico en un lugar sostenible.
• Tramitación del Catálogo de protección de edificios de la Exposición universal.
• Tramitación del traslado de sede de la Gerencia de Urbanismo para que el espacio pase a destinarse a proyectos que contribuyan a la generación de actividad económica y empleo en Cartuja.
• Desarrollo de Cartuja como zonas de bajas emisiones.

El edil citó la reciente ejecución de obras en el Parque Científico y Tecnológico Cartuja por valor de 231.000 euros para pavimentación de Álvaro Alonso Barba, Juan Bautista Muñoz, José de Gálvez y, Matemáticos Rey Pastor y Castro. Y agregó que conjuntamente se actúa sobre la pasarela del lago y, puntualmente, sobre el Puente de la Barqueta.

Desde el Parque Científico y Tecnológico Cartuja, el director Luis Pérez Díaz expresó la determinación de la Junta y del Ayuntamiento por que "Sevilla vuelva a presumir de la isla de la Cartuja y vuelva a ponernos en circulación", dijo en referencia al logro de la ciudad durante la Expo92, y se mostró convencido de que Cartuja va a ser "un activo potente" turísticamente. Pérez recordó que el recinto científico y tecnológico de la isla está casi colmatado, facturó 2.900 millones de euros en 2020 y cuenta con casi 23.000 empleados directos y más de 500 empresas. La facturación agregada por las empresas y entidades del recinto representa ya el 7,8% del Producto Interior Bruto (PIB) de la provincia de Sevilla y el 1,9% del PIB regional.