Serrano alega que sólo indicó a Fitonovo dónde "había un cliente"

Sólo sugirió, pero nunca le ordenó que hiciera gratis una obra. Ésta es la respuesta que el delegado de Economía, Empleo, Turismo y Fiestas Mayores del Ayuntamiento de Sevilla, Gregorio Serrano, dio este martes a los periodistas tras preguntarle por las declaraciones del empresario de Fitonovo, José Antonio González Baró, ante la juez Mercedes Alaya por el caso Enredadera. En dicha comparecencia afirmó que el edil popular le pidió que esta entidad hiciera gratis un parque infantil para la comandancia de la Guardia Civil en Montequinto, extremo que niega Serrano, quien alega que sólo le indicó al citado empresario dónde había "un potencial cliente".

El caso Enredadera, una fase de la operación Madeja -que investiga una trama de sobornos a funcionarios por parte de la empresa Fitonovo a cambio de contratos públicos- empieza a salpicar al gobierno local de Sevilla que, por ahora, como hizo el pasado lunes el alcalde, ha plantado cara a las informaciones que han trascendido del sumario del caso. El otro afectado, además de Zoido, por las comparecencias ante la juez Alaya es el concejal Gregorio Serrano. En su declaración, el empresario González Baró llegó a asegurar que el edil del PP le había pedido que hiciera "gratis" un parque infantil para la comandancia de la Guardia Civil en Montequinto. Esta petición -siempre según la declaración del empresario- la hizo realidad para "congraciarse" con el gobierno municipal.

Serrano admite que existió una conversación con Fitonovo en la que se habló del referido parque infantil, pero en ningún momento pidió que la obra se hiciera gratis, de la cual no tiene ni constancia sobre si llegó a ejecutarse.

Dicho encuentro se mantuvo en 2011, durante los primeros meses de gobierno del PP en Sevilla. A la cita acudió González Baró, quien se presentó con varios proyectos para la ciudad hispalense. "Preguntó si necesitaba algo de esta empresa", recuerda Serrano, quien a esa pregunta respondió que "lo que necesitaba es que esos 50 millones que decía que tenía para invertir los dejara en Sevilla".

En el desarrollo de la conversación, el concejal le indicó que había estado días antes en un acto oficial celebrado en el cuartel de la comandancia de la Guardia Civil en Montequinto y que allí había un "pequeño terreno de albero que hacía falta que fuera transformado con césped para los niños de los agentes". Serrano defiende que lo único que le dijo fue "que tenía allí ese potencial cliente y que se acercara a ver qué podía hacer por ello", aunque actualmente "desconoce" lo que ocurrió, "si hizo el trabajo, si lo cobró, si era de 150.000 o de 1.000 euros". "Era una empresa de jardinería con la que hablaba algo que no tenía trascendencia, pero que visto en este contexto ahora parece que sí la tiene. En ese momento yo no sabía de qué empresa se trataba, ni que se dedicaban a esas cuestiones", explica el concejal popular.