Los pantanos del Guadalquivir ya están por debajo del 25%
Sequía
Los expertos se aferran a que la lluvia haga acto de presencia en otoño
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La situación actual de la cuenca del Guadalquivir sigue siendo de "alerta por sequía", aunque hay algunos territorios algo mejor y otros con un panorama aún peor, según el último informe de la Confederación Hidrográfica a 30 de junio de 2023. Las esperanzas de los expertos están puestas en que en otoño e invierno de este año caiga abundante agua del cielo con suficiente intensidad como para alejar el fantasma de la sequía.
Los embalses de la cuenca continúan reduciendo sus reservas de agua mes tras mes por la falta de lluvia y la evaporación que provoca el calor extremo. En la actualidad, según datos del 7 de julio de 2023, el nivel de agua embalsada en las presas ha bajado hasta dejarlas al 22,90% de su capacidad. Hace solo dos meses el agua alcanzaba más altura: el 30 de junio las presas estaban al 23,37% y el 31 de mayo al 23,90%.
En la provincia de Sevilla, los cortes en el abastecimiento de agua a determinadas horas se han iniciado en la Sierra Sur, concretamente en el municipio de Casariche.
Si miramos los pantanos que abastecen a Sevilla, los que están en mejor situación, por encima de la mitad de su capacidad, son La Minilla (63,54%) y Melonares (57,44%). Le siguen, con menos de la mitad del agua embalsada, El Gergal (45,21), Cala (42,99%), Agrio (43,60) y Huesna (36,80). El peor balance se lo llevan el embalse de la Puebla de Cazalla, que está prácticamente vacío (1,96%), El Pintado (16,19%), Zufre (14,52%) y Torre del Águila (10,58%).
Los embalses de Bembézar (Córdoba) y Retortillo (Córdoba) que abastecen a los 17 municipios sevillanos y 200.000 habitantes del Consorcio de Aguas Plan Écija se encuentran en una situación preocupante: de 13,97% y 11,60% respectivamente a 7 de julio, según CHG.
Los datos de los embalses pueden verse en este enlace.
En función de la gravedad de la escasez de agua, la Confederación establece cuatro categorías: normalidad, prealerta, alerta y emergencia. Están en alerta por sequía la mayor parte de los territorios, salvo cinco en prealerta (Rivera de Huesna, Vega Alta y Media de Granada, Dañador, Guadalentín y Melilla), tres en emergencia (Martín Gonzalo, Sierra Boyera, Bembézar-Retortillo- abastece a 17 municipios y 200.000 habitants del Consorcio de Aguas Plan Écija) y dos en normalidad (Aguascebas y Ceuta).
Si hablamos del estado de la sequía, las categorías son sequía prolongada y, aún más grave, la ausencia. El estado general de la cuenca es el de "ausencia" por sequía prolongada.
A fecha del 7 de julio, el sistema de regulación general (destinado a uso agrario sobre todo) está en peor situación (embalses al 20,67%) que el resto de embalses (al 28,14%). La situación global de la cuenca Guadalquivir es del 22,89%, según la CHG.
Cortes en Casariche
Los vecinos de Casariche sufren desde inicios de julio cortes de agua por la situación de sequía: desde las 22:00 a las 6:00 de la mañana. Este pueblo de la Sierra Sur se ha convertido en el primer municipio de la provincia de Sevilla donde el abastecimiento de agua estará limitado este verano.
Según informa el Ayuntamiento de Casariche, los cortes de este suministro comenzaron la noche del miércoles 5 de julio y se repetirán todos los días desde las diez de la noche hasta las seis de la mañana "hasta nuevo aviso".
En Andalucía, más de cien municipios sufren incidencias en el suministro. De esta cifra, los vecinos de 27 de ellos no tienen agua potable y 14 localidades sufren cortes de agua nocturnos de manera diaria. Las provincias de Málaga, Córdoba y Huelva son las más afectadas.
El abastecimiento urbano está garantizado para finales de 2024, según la Confederación Hidrográfica del Guadalquivir (CHG). Así lo dijo a mediados de junio de este año 2023, el presidente de la Confederación Hidrográfica del Guadalquivir (CHG), Joaquín Páez, quien aseguró que "el abastecimiento urbano está garantizado para un año y medio, aunque no cayera una sola gota de agua", que la cuenca del Guadalquivir está preparada para afrontar la escasez de agua a pesar de que esta sufre la sequía más "intensa y larga desde 1970".
Emasesa y Aljarafesa
En los municipios de Sevilla abastecidos por Emasesa (12) y Aljarafesa (31) no hay cortes de agua como en Casariche, pero sí prohibición de usar agua potable en determinados supuestos desde el 3 de octubre de 2022:
- Riego de jardines, praderas, arboles, zonas verdes y deportivas, de carácter público o privado.
- Riego o baldeo de viales, calles, sendas y aceras, de carácter público o privado.
- Llenado de piscinas, estanques y fuentes, privadas o públicas, que no tengan en funcionamiento un sistema de recuperación o circuito cerrado.
- Fuentes para consumo humano que no dispongan de elementos automáticos de cierre.
- Lavado con manguera de toda clase de vehículos, salvo si la limpieza la efectúa empresa dedicada a esta actividad.
- Instalaciones de refrigeración y acondicionamiento que no tengan sistema de recuperación o circuito cerrado.
Consejera de Agricultura
Desde el Gobierno andaluz, la consejera de Agricultura, Pesca, Agua y Desarrollo Rural, Carmen Crespo, ha agradecido a operadores y ayuntamientos andaluces que estén tomando medidas de ahorro de agua "con mucha responsabilidad" frente a la situación de sequía. Según sus palabras, el ahorro "no es negociable", pero sí las medidas que se adopten para conseguirlo, que ha calificado como "coherentes".
En una visita técnica a la desaladora de Marbella (Málaga) y una reunión sobre la depuradora (ETAP) Río Verde, de esa misma ciudad costasoleña, la consejera señaló la gravedad de la situación. "Nosotros estamos ahora mismo en sequía y eso es una situación que hay que poner encima de la mesa. Nosotros, como sistema, lo que hacemos es decirle a los operadores del agua y a los ayuntamientos que tienen que ahorrar un 10%, en el caso de la Costa del Sol, en agua", dijo en referencia a la comarca del litoral occidental de Málaga.
"Ellos son los que establecen las medidas para ahorrar ese 10%. Hay numerosas alternativas, en este caso en baldeos, en jardines, en duchas... cada uno adopta las circunstancias que considera más oportunas dentro de la libertad que tiene para ese ahorro del 10%" ha añadido.
La consejera también ha asegurado que "lo que sí es negociable es que cada uno pueda adoptar libremente sus medidas con total independencia" y que "luego, los ayuntamientos son los que tienen que evaluar dentro de su plan de emergencia en la sequía cuáles son las medidas a adoptar. Y yo creo que lo están haciendo con mucha responsabilidad y, por supuesto, con todos los elementos de juicio para poder ahorrar agua en una u otra cuestión". Ha señalado que cada municipio es diferente y que hay que concienciar a la población de un buen uso del agua.
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