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Sanitarios sevillanos en la 'élite'

Reconocimiento de la Agencia de Calidad Sanitaria de Andalucía

La Unidad de Ginecología y Patología Mamaria del Hospital Virgen del Rocío es la única de su especialidad con un nivel de acreditación de 'Excelente' en Andalucía reconocido por la Agencia de Calidad Sanitaria.

Parte del total de profesionales que componen la Unidad de Ginecología y Patología Mamaria en el Virgen del Rocío. / H. U. V. R.

Una "satisfacción" por el reconocimiento al "esfuerzo y trabajo brutal de todos los profesionales", pero también un "reto y un revulsivo" para intentar no bajar el nivel y mantener la excelencia en la calidad del servicio y atención a los pacientes. De este modo resumen desde la Unidad de Ginecología y Patología Mamaria del Hospital Virgen del Rocío lo que sienten al haber sido designada como el mejor servicio en su categoría en toda Andalucía como la única unidad de su especialidad que cuenta con la certificación en nivel Excelente, el más alto que otorga la Agencia de Calidad Sanitaria de Andalucía (ACSA), entidad de evaluación y certificación perteneciente a la Consejería de Salud y Familias e integrada en la Fundación Progreso y Salud, y cuyos estándares están reconocidos por organismos de acreditación nacional e internacional como la ENAC o la International Society for Quality in Healthcare (Isqua).

El reconocimiento de la ACSA garantiza que la actividad de los centros certificados se ajusta a los estándares de calidad definidos en los manuales de certificación, demostrando su compromiso con la excelencia y la mejora continua del servicio que ofrecen a la ciudadanía. Tiene tres niveles de menor a mayor categoría: Avanzado, Óptimo y Excelente. El primero garantiza que esa unidad dispone de una serie de recursos y controles; el Óptimo que los evalúa de forma programada; y el Excelente, que lleva a cabo una planificación de futuro.

En la unidad de Ginecología y Patología Mamaria del Virgen del Rocío, que trabaja desde el Hospital de la Mujer, donde cuenta con las consultas, quirófanos y planta de hospitalización, y las consultas externas del Centro de Especialidades Doctor Fleming, se atiende toda la patología ginecológica y de mama, llegando a abordar alrededor de 15.000 primeras consultas al año y otras tantas revisiones de procesos abiertos. Anualmente se superan las 4.000 intervenciones quirúrgicas, de las cuales 500 son cánceres de mama y 300 canceres ginecológicos (cérvix, útero, ovario, vulva y vagina), correspondiéndose el resto a patología ginecológica benigna programada o urgente.

Parte del equipo en la puerta del Centro de Especialidades Dr. Fleming. / H. U. V. R.

Según relata su jefa de servicio, María Ángeles Martínez, fue hace aproximadamente una década cuando desde la unidad se apostó por la calidad como fundamento de su actividad, "considerando a sus pacientes como personas autónomas que participan en su proceso de salud, que deciden, que son escuchadas además de atendidas, y cuyas opiniones son tenidas en cuenta a la hora de establecer la atención y los cuidados que se les aportan".

El resultado, un reconocimiento a nivel comunitario con la distinción más alta que otorga la Agencia de Calidad Sanitaria de Andalucía y que es fruto de un trabajo sin descanso "de todos los profesionales" a los que se les exigen exhaustivos controles de su actividad más allá de lo meramente clínico y que les ha permitido mantenerse en la cima de los estándares de calidad.

"No se le da mucha importancia a la acreditación de las unidades y lo cierto es que es un antes y un después, sobre todo, cuando entras en niveles de acreditación alto porque te obliga a una serie de controles que se tienen que cumplir a rajatabla y a un esfuerzo brutal porque todo lo hacemos los mismos profesionales de la unidad. Todo el mundo se tiene que acostumbrar a que además de su trabajo clínico, que damos por supuesto que es correcto, aparte tiene que llevar un control de que los resultados que está obteniendo también lo son. Y luego, es fundamental, la pregunta. Nosotros le preguntamos a los usuarios con encuestas de satisfacción a pie de cama y en función de lo que nos dicen actuamos y corregimos sobre la marcha", explica la doctora Martínez.

El personal de la unidad durante un curso de cirugía ginecológica por laparoscopia. / H. U. V. R.

En el proceso de acreditación, según sus responsables, es clave "el trabajo en equipo". Por su parte, alcanzar la excelencia, recalcan, ha permitido a la unidad documentar, planificar y evaluar su actividad mediante sus planes de calidad, de seguridad, de promoción y prevención de la salud, de formación, de innovación, de evacuación y de emergencias, entre otros.

Además, alcanzar el sello de calidad en nivel Excelente ha permitido a esta Unidad "reflexionar" de manera coordinada y compartida, sobre qué se hace, cómo se hace y cuándo se hace, "teniendo en cuenta la experiencia de las pacientes para poder establecer medidas de mejora en base a sus sugerencias", indican sus profesionales. Para ello, se dispone de canales reales de participación ciudadana con grupos de apoyo como la Escuela de Pacientes de Cáncer de Mama, el Aula de Salud, los buzones de sugerencias, las quejas y reclamaciones que son analizados periódicamente. "Incluso, la climatización y comodidad de las habitaciones ha ido mejorando progresivamente gracias a las sugerencias de los usuarios y de los propios profesionales", destacan desde la unidad. "Y todo ello se ha realizado atravesando la crisis económica y la emergencia sanitaria de la pandemia por Covid-19. A pesar de que la Unidad ha sido solidaria con otras unidades, cediendo personal, recursos, camas y quirófanos cuando era necesario, no ha tenido impacto en la calidad de la asistencia y en los resultados en salud", añaden.

En cuanto a la organización, la evaluación que ha permitido llevar a esta unidad a la élite sanitaria consta de tres circuitos: soporte, asistencial y gestión. "Todos cuentan y todos son igual de importantes", destaca el enfermero Fernando Ventura, responsable de Calidad, junto a la Directora de Cuidados, Adoración López.

En el circuito de soporte se evalúan todos los elementos que constituyen la estructura de la unidad: mantenimiento, electromedicina, limpieza, seguridad, dietética, prevención de riesgos laborales, la unidad de gestión ambiental o la informática. "Por ejemplo todos los aparatos electromédicos como son ecógrafos, aparatos de tensión o desfibrilador, los sistemas de protección y los botiquines son revisados periódicamente, quedando registrados estos controles, de manera que cualquier desviación supone un plan de mejora para subsanarla. Otro ejemplo sería los sistemas de evacuación, de manera que en caso de incendio o emergencia, todos los profesionales saben como actuar para realizar la evacuación de los pacientes", explica el enfermero.

Por otro lado, en el circuito asistencial, se tiene en cuenta la atención y los cuidados a los pacientes ambulatorios y hospitalizados en su recorrido desde su primer contacto hasta el alta. "Se actúa asegurando la accesibilidad de los servicios mediante la coordinación con atención Primaria, lo que ha permitido que esta Unidad haya cumplido durante años, e incluso en época de la pandemia, con los plazos mínimos establecidos para las demoras de consulta y las listas de espera quirúrgicas", destaca Fernando Ventura. Se valora, entre otras, la calidad de la historia clínica en la que deben quedar reflejados todos los ítems de calidad necesarios para evitar problemas de seguridad como por ejemplo las alergias a medicamentos.

Una paciente durante la realización de una mamografía en una revisión en la unidad. / H. U. V. R.

Y en el tercer circuito se valora la gestión de los procesos asistenciales de Ginecología, cáncer de mama, cáncer de cérvix o hemorragias genitales y transexuales. "Anualmente se realiza una evaluación para verificar si estos procesos se llevan a cabo con las directrices indicadas por la Consejería de Salud, y en los plazos convenidos y con los resultados esperados estableciéndose medidas de mejora", indica la doctora Martínez, que destaca contar con las estancias hospitalarias más cortas en todos los procesos, incluidos los tumorales, de toda Andalucía, sin que esto suponga un incremento en el índice de reingresos o complicaciones, aspecto en que, asegura, se encuentran en niveles por debajo de la media nacional. "Esto se debe a que hacemos mucha cirugía endoscópica, pero también es muy importante en nuestra unidad la cirugía conservadora de cáncer de mama, evitando la extirpación mamaria, y obteniendo unos resultados estéticos óptimos gracias a las técnicas de cirugía oncoplástica; la cirugía robótica; la cirugía de suelo pélvico; y la cirugía avanzada de la endometriosis, que cuenta con un equipo multidisciplinar en el que participan cirujanos generales, urólogos, y anestesistas especializados en el tratamiento del dolor", añade María Ángeles Martínez.

La misma concluye reconociendo que, alcanzar el máximo nivel de calidad que la ACSA otorga a los centros y unidades asistenciales, "es un reconocimiento al esfuerzo de una Unidad excelente en su actitud, su dedicación, su profesionalidad y su entrega, y también un estímulo para seguir avanzando en la estrategia de calidad". Y añade: "Este proceso no significa ser los mejores, sino ser mejores cada día. No es en una competición para destacar sobre el resto, si no un proceso de mejora continua que permita ofrecer el mejor servicio a la sociedad andaluza".

La tercera Unidad mejor valorada en Andalucía

En Andalucía ya son 629 los centros y unidades del sistema sanitario y de servicios sociales que cuentan con la certificación de la Agencia de Calidad Sanitaria de Andalucía (ACSA). Llegar a este reconocimiento no es fácil y mucho menos entre los mejores.

La Unidad de Ginecología y Patología Mamaria del Virgen del Rocío se ha colado en este ránking en tercera posición. Es, junto a las unidades de de Cirugía Torácica y Trasplante Pulmonar del Hospital Reina Sofía de Córdoba, que ocupa el primer puesto con una evaluación del 100%, y la unidad de Cuidados Intensivos y Urgencias Pediátricas del Hospital Regional de Málaga, con un 97% la tercera unidad de gestión clínica reconocida por la ACSA en su nivel más alto de certificación, el Excelente (por debajo estarían el nivel Óptimo y el Avanzado), con una puntuación del 94% en cuanto al cumplimiento de los estándares de calidad definidos en los manuales de certificación, demostrando así su compromiso con la excelencia y la mejora continua del servicio que ofrecen a la ciudadanía.

Por otro lado, en estos momentos, las organizaciones con mayores porcentajes de cumplimiento de estándares en la certificación de sus unidades son el Hospital Clínico San Cecilio de Granada, el Hospital Virgen del Rocío de Sevilla y el Área de Gestión Sanitaria Norte de Málaga. Asimismo, los centros con mayor cobertura de unidades certificadas son el Distrito de Atención Primaria Bahía de Cádiz-La Janda (que cuenta con la certificación del 75% de sus unidades), el Hospital Reina Sofía (73,8%), y el Hospital Virgen del Rocío (70%).

Cabe destacar también los resultados de los centros andaluces de atención infantil temprana, los llamados CAIT, que son entidades que ofrecen servicios de atención especializada a menores con trastornos del desarrollo o en riesgo de padecerlos. Entre los CAIT de Andalucía, 39 cuentan con el sello de calidad de la ACSA, seis de ellos en nivel Óptimo y con notables resultados en relación al cumplimiento de estándares: los centros de las asociaciones Aspapros y Asprodesa en Almería; los de la Orden Hospitalaria San Juan de Dios en Córdoba, Granada y Sevilla; y el de la asociación Asprodisis en Ronda.

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