San Leandro abre sus puertas para conseguir fondos para su restauración

El Monasterio de San Leandro vivirá mañana miércoles, festividad de la Virgen del Pilar, una jornada de puertas abiertas en las que se podrán contemplar diversas estancias del convento que no son accesibles para el público. La iniciativa, organizada por la Asociación de Profesores para la Difusión y Protección del Patrimonio Ben Baso, persigue concienciar a los sevillanos de la restauración urgente que necesita el monumento. Todas las personas que acudan podrán aportar su grano de arena adquiriendo las afamadas yemas y dulces que preparan las religiosas para contribuir a la realización de los trabajos de reparación que necesita el edificio.

Las visitas, que se desarrollarán de 10:00 a 13:30 y de 16:30 a 19:00, serán de alto nivel por la experiencia y conocimiento de los asociados de Ben Baso, todos ellos titulados superiores. El público podrá disfrutar de las obras de arte que se guardan en la iglesia, del coro, del claustro, o de la sala capitular y recibir las explicaciones oportunas de los profesores. Será una oportunidad única para sorprenderse con las estancias claustrales del cenobio y para conocer cómo es la vida de las religiosas agustinas y los secretos de este magnífico edificio de la segunda mitad del siglo XVI.

Diario de Sevilla se hizo eco el pasado mes de junio de la dolorosa agonía por la que atraviesa este importante monumento de la ciudad. Las religiosas tuvieron que dedicar 15.000 euros, conseguidos mediante donaciones, a reparar el daño causado por las filtraciones de agua ocasionadas por las intensas lluvias de la primavera. Ese dinero tenía como destino prioritario acometer las obras de más urgencia que necesitaba el edificio, principalmente en la fachada, que presenta zonas protegidas por redes para evitar que los desprendimientos lleguen a la calle, y el interior de la iglesia, sobre todo en la cúpula, que tiene grietas de considerables dimensiones por las que cabe una mano.

El convento de San Leandro es uno de los de mayor extensión de la ciudad. Ocupa una superficie de 5 kilómetros cuadrados. Está declarado Bien de Interés Cultural. La iglesia cuenta con obras importes de Duque Cornejo, Martínez Montañés, o los hermanos Felipe y Dionisio de Ribas.