El Ayuntamiento tumba el proyecto hostelero en el Parque Vega de Triana
Urbanismo
Los técnicos rechazan la actividad por problemas de ruido y aglomeraciones de público en zonas muy próximas a viviendas
El Ayuntamiento ha emitido un informe desfavorable a la solicitud de licencia de actividad ocasional para un proyecto de instalaciones de hostelería y espectáculos musicales al aire libre en unos suelos de titularidad de la Confederación Hidrográfica del Guadalquivir (CHG) ubicados en el Parque Vega de Triana. Esta decisión se ha adoptado una vez evaluados los informes contrarios emitidos por la delegación de Gobernación y Fiestas Mayores, el área de Parques y Jardines, el Servicio de Movilidad y el propio distrito.
La denegación se basa en que la actividad ocasional solicitada puede producir problemas en el barrio y en el parque especialmente dado que el proyecto recoge su implantación durante varios meses. Entre otros motivos, los informes apuntan problemas por ruido y aglomeraciones de público en zonas muy próximas a viviendas, con el agravante del horario nocturno, así como el deterioro que se puede producir en el parque o situaciones de inseguridad vial.
El gobierno socialista sostiene que se ha escuchado y tenido en cuenta en este proceso de análisis de la solicitud de licencia de actividad ocasional a los vecinos del entorno. Desde principios de abril, cualquier ciudadano que se acercase al Parque Vega de Triana ha podido observar que la zona más cercana al rascacielos se encuentra ocupada por varias estructuras metálicas en distintas fases de montaje.
Esos suelos que lindan con el parque han sido cedidos por la CHG) a una empresa que cuenta con un proyecto que mezcla el ocio y la hostelería con la idea de permanecer abiertos varios meses. El evento se asemeja bastante al que se instaló la pasada Navidad en el Muelle de las Delicias. Atracciones como una pista de hielo o una noria de 32 metros se complementaban con un mercadillo de artesanía y una zona de restauración para que toda la familia disfrutase de la visita a un parque de atracciones de invierno que hasta diciembre de 2019 se instalaba en el Prado de San Sebastián. La situación sanitaria fue el principal motivo para pasar de 8.000 a 80.000 metros cuadrados, lo que evitó colas y concentraciones.
Sobre este nuevo proyecto, al Ayuntamiento sólo le corresponde la autorización del evento. El promotor carece de una licencia de actividad ocasional y de permisos para instalar las distintas estructuras que ya se encuentran en esa zona junto al parque. De hecho, la Policía Local se ha personado en varias ocasiones para parar los trabajos. La Gerencia de Urbanismo sólo autorizó a la empresa que apile los materiales.
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