Preocupación vecinal en Heliópolis y su entorno por las obras del Colector Emisario Puerto
Confederación Hidrográfica del Guadalquivir
Hay varias denuncias en Urbanismo por el ruido "infernal" y las vibraciones que causa la maquinaria, y varias viviendas han sufrido daños
El corte inminente de la avenida de la Raza durante un año se quiere solucionar con el desvío del tráfico por la avenida de Reina Mercedes y La Palmera, a lo que se oponen los vecinos
Avanzan las obras de renovación de la red de aguas residuales de Sevilla
La obra de renovación de las redes de aguas residuales en Sevilla está afectando seriamente a los vecinos de los barrios del entorno del Parque del Guadaíra (Heliópolis, Reina Mercedes, Bermejales, etc.), donde se ejecuta desde hace meses la ampliación del Colector Emisario Puerto para conectarlo con las canalizaciones que vienen desde San Jerónimo. Los trabajos se desarrollan en la actualidad en la zona del parque de la calle Padre García Tejero con tales ruidos y vibraciones que han resultado afectadas varias viviendas con grietas en el vallado exterior y desprendimientos de molduras. Las obras afectan al Parque y también al IES Punta del Verde.
La Confederación Hidrográfica del Guadalquivir (CHG) ejecuta la obra en esta zona, a través de la empresa Sando, en coordinación con Emasesa, empresa metropolitana que ha redactado el proyecto y, una vez terminada la obra, la recepcionará, explica la Confederación.
Los vecinos denuncian que están soportando ruidos “infernales” de hasta 95 decibelios que genera el uso de “maquinaria no adecuada” para esta obra: un martillo de 10 metros de altura golpeando sobre estructuras de acero de 15 metros de alto para meterlas a 8 metros de profundidad en el terreno a base de golpes. Esta ha sido la forma de preparar el terreno para meter con seguridad las gigantescas conducciones de aguas residuales, “por razones presupuestarias”, denuncian los vecinos.
La CHG asegura que ahora están escuchando a los vecinos
La Confederación Hidrográfica del Guadalquivir admitió este miércoles que “la situación actual es de máximo diálogo con los vecinos” respecto a la obra del Colector Emisario Puerto. Como resultado de las diversas reuniones que están teniendo sus técnicos y Emasesa con los afectados y con la dirección facultativa, “estamos adaptando al máximo el desarrollo de la obra con las demandas de los vecinos”, defendió.
Entre otras acciones, se han reducido y ajustado los horarios de trabajo de obra, se han colocado testigos en las viviendas para conocer si se producen afecciones durante la ejecución, se está informando a los representantes vecinales no solo mediante reuniones con los afectados sino a título personal –demandas recogidas por un interlocutor nombrado por las administraciones implicadas– y con comunicaciones vía octavillas y carteles.
Con respecto al tráfico, se continúa trabajando con la DGT, Movilidad del Ayuntamiento y la Dirección General de Carreteras para abordar y coordinar todos los desvíos y obras que afectarán a los barrios durante el medio plazo.
Su intención es “seguir avanzando en la obra con el menor agravio para los vecinos, a los que continuaremos escuchando con el fin de molestarles lo más mínimo”.
El nivel de ruido sobrepasa el límite legal en zona residencial de 65 decibelios e incluso el máximo de 75 decibelios que permite la normativa europea en casos puntuales. “Es una obra de interés general que nos estamos comiendo los vecinos”, se queja Juan Carlos Marcellán, portavoz de los vecinos afectados. Las reiteradas quejas de los residentes han derivado en varias denuncias ante Urbanismo y han obligado a la CHG a reducir un poco los ruidos taladrando el terreno antes de meter las estructuras. Pero los ruidos siguen siendo muy elevados: de 88 decibelios al menos, según los vecinos.
Ante las quejas de los residentes, la Confederación ha convocado varias reuniones con los vecinos. Las dos primeras fueron muy tensas por la falta de explicaciones, por los daños en algunas viviendas de las calles Perú y Bolivia y molestias a todos los vecinos por los ruidos y vibraciones puntualmente insoportables, denuncian las asociaciones Foro Heliópolis, Bermejales Activa y Parque Vivo del Guadaira.
En la tercera reunión, el 20 de junio, al día siguiente de las elecciones andaluzas, se han llegado a acuerdos. Se han instalado sensores en algunas viviendas afectadas por las vibraciones para ver los efectos y, si algún valor se sale de los rangos establecidos, se tomarían las medidas necesarias. Cualquier daño que haya causado la obra se debe registrar/denunciar en la sede de la CHG (a la dirección de obra), que se compromete a dar instrucciones para que los vecinos sepan cómo proceder en las reclamaciones.
Sobre el Parque del Guadaíra, los árboles que se quitaron, se trasplantaron y se volverán a traer para dejar el parque como estaba. No se va a afectar a ningún otro sector del parque por estas obras, promete Confederación.
Asistieron a la reunión Marcellán, portavoz de los vecinos afectados, además de unos 50 vecinos y representantes de las asociaciones Foro Heliópolis, Los Andes, Siete Calles y Parque Vivo del Guadaira. Por las administraciones acudieron técnicos de Emasesa y de la Confederación.
Emasesa reconoció en la reunión las críticas por la deficiente comunicación con los vecinos y se comprometió, a partir de ahora, a comunicar con carteles y octavillas todos los futuros cortes y planes de obra, con presupuestos y plazos. La CHG y Emasesa se comprometen a habilitar alternativas a los cortes de tráfico y a informar adecuadamente al vecindario.
Este miércoles acabó el trabajo más ruidoso
La Confederación aseguró este miércoles a este periódico que el trabajo más ruidoso y de vibración de esta obra finalizó justamente a lo largo de ese mismo día. El organismo estatal señala que “hasta el 6 de julio no se retomarán los trabajos en otras zonas más alejadas de las viviendas, lo que repercutirá en un menor impacto”. El próximo corte de tráfico para el avance del colector está previsto en la incorporación a la avenida de las Razas, justo detrás del colegio de La Raza.
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