La Policía triplica la media diaria de multas a 'gorrillas' en una semana

La Policía Local de Sevilla ha interpuesto un total de 35 denuncias a aparcacoches ilegales o gorrillas en las actuaciones desarrolladas en la última semana en diversas zonas de la capital. Estas cifras suponen una media de cinco denuncias diarias, el triple que la alcanzada durante el primer semestre del presente año 2011 y el cuádruple de la media de todo el pasado 2010, según indicaron ayer fuentes municipales.

Tras la visita al barrio de Bami del alcalde, el popular Juan Ignacio Zoido, el pasado 17 de agosto, en la que dio orden a la Policía Local de actuar contra esta práctica en toda la ciudad, se han llevado a cabo operativos de vigilancia y control de los gorrillas en varias zonas: Bami, Macarena, Nervión y, en el centro, en el entorno de las calles Adriano, Reyes Católicos y Marqués de Paradas.

Sólo en esta zona céntrica, los agentes interpusieron el pasado sábado un total de diez denuncias. En el distrito Sur, con especial incidencia en Bami, han sido denunciados 19 aparcacoches ilegales, en Macarena dos y en Nervión cuatro, y se ha identificado a otro. En total, 35 denuncias en más de una veintena de intervenciones en los últimos siete días, en las que también se ha desarrollando una importante labor disuasoria.

Estos datos sitúan en sólo una semana la media de denuncias en un 384,6% por encima de los obtenidos durante el primer semestre de 2011, periodo en el que la media de denuncias por día se ha situado en 1,3. Del mismo modo, en comparación con el total del año 2010, con una media de 1,1 denuncias por día, las cifras que arroja la Policía Local en la última semana en esta materia son un 454,5% superiores.

Esta labor policial es fruto de la motivación transmitida a los agentes, que "pueden estar seguros de que a partir de ahora sus denuncias no se van a quedar en papel mojado, pues el Ayuntamiento se encargará de tramitarlas convenientemente", apuntó el alcalde. En los últimos días, los policías han advertido a los conductores que no están obligados a pagar a los gorrillas. La intención es intensificar la vigilancia y evitar que el conductor se sienta presionado o incluso amenazado por estos aparcacoches ilegales. La pasada semana al menos un gorrilla fue detenido por dañar un vehículo y enfrentarse a su conductora. Los agentes también han empezado a requisar el dinero recaudado por esta práctica.