La Policía retiró sus patrullas a caballo en Sevilla durante la crisis del coronavirus

Los agentes de la unidad de Caballería pasaron a prestar servicio en vehículos, pero sin chalecos antibalas

El SUP pide que se dote a los policías de material de protección individual para reducir el riesgo de contagio

Una policía de la unidad de Caballería de Valencia, donde sí se ha mantenido el servicio.
Una policía de la unidad de Caballería de Valencia, donde sí se ha mantenido el servicio. / EFE

La Policía Nacional ha dejado de patrullar a caballo en Sevilla durante la crisis del coronavirus. Es la única ciudad que cuenta con una unidad de Caballería de toda España en la que se ha retirado temporalmente este servicio. Los agentes de este grupo han pasado a patrullar a hora en vehículos, pero lo hacen sin chalecos antibalas.

Esta es la denuncia que ha hecho el Sindicato Unificado de Policía (SUP), a través de su secretario de Acción Sindical en la capital andaluza, Ángel Becerra. Desde que se decretó el estado de alarma, los integrantes de dicha unidad pasaron de prestar sus servicios a caballo a hacerlo en radiopatrullas, integrados en el dispositivo de seguridad ciudadana, "pero sin contar con los medios necesarios para ello".

En las últimas semanas, los agentes de la unidad de Caballería han intervenido en reyertas con armas blancas y en otras situaciones en las que han estado expuestos a diversos peligros para su integridad física. El 4 de mayo, tras numerosas peticiones, el SUP registró un documento en la Comisaría Provincial mediante el cual solicitaba los chalecos de uso individual, "para mantener las medidas preventivas que las autoridades aconsejan ante el Covid-19, pero a día de hoy no ha habido respuesta".

A los agentes se les ha dotado de chalecos de uso compartido, algo totalmente desaconsejado en plena pandemia, por el riesgo de transmisión del coronavirus.

El sindicato recuerda que en España hay tres unidades de Caballería, la de Madrid, la de Valencia y la de Sevilla. La hispalense es la única que no cuenta con las medidas de protección necesarias y la única que ha dejado de hacer su trabajo habitual para reforzar el trabajo de seguridad ciudadana, "pero con el inconveniente de que, mientras el resto de compañeros sí los tienen, esta unidad sigue trabajando sin los necesarios chalecos antibalas, lo que pone en peligro sus vidas a diario".

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