La Policía requisa en mercadillos 300 animales y 5.500 artículos falsos
Los agentes intervienen pájaros, perros y gallos de pelea en el Charco de la Pava
La Policía Local intervino el pasado fin de semana más de 5.500 artículos falsos y casi 300 animales que estaban siendo vendidos de manera ilegal en distintos mercadillos de la ciudad. Los agentes municipales inspeccionaron 13 recintos de venta ambulante y levantaron 5 atestados por delitos contra la propiedad intelectual. Otras siete personas fueron puestas a disposición judicial por este mismo delito, según informó ayer el Ayuntamiento de Sevilla en un comunicado remitido a este periódico.
Este balance corresponde al primer fin de semana del plan especial de Navidad que ha puesto en marcha el Ayuntamiento de Sevilla contra la venta ambulante ilegal. Ya en los anteriores fines de semana la Policía había reforzado el control sobre los mercadillos ante las sospechas de que se vendiera una avalancha de falsificaciones en los mercadillos de cara a las fiestas navideñas.
De ahí que tanto el sábado como el domingo los agentes de la Policía Local realizaran inspecciones en los mercadillos del Parque Alcosa y el Charco de la Pava. En ambos recintos se incautaron de 5.564 artículos falsos. Entre estos productos había tanto material audiovisual pirateado como prendas de marca falsificadas. Ya el anterior fin de semana la Policía decomisó una cantidad similar de películas, videojuegos y discos de música piratas, así como frascos de perfumes de imitación de grandes marcas. Los responsables policiales creen que este año puede incrementarse la venta de estos productos ilegales en relación a los años anteriores debido a la crisis económica.
Durante la mañana del domingo también se requisaron casi 300 animales que se vendían sin autorización en el Charco de la Pava. La mayoría de ellos, 284 concretamente, eran pájaros que los vendedores suelen camuflar entre los árboles para evitar la vigilancia policial. También se decomisaron cuatro perros y seis gallos de pelea. Además, los policías requisaron a los vendedores varias trampas ilegales utilizadas para capturar animales y cuyo uso está prohibido por ley. Entre estos aparatos había cepos de grandes dimensiones para la caza de jabalíes, venados y ciervos.
Algunas de las aves intervenidas por la Policía se encontraban encerradas en jaulas pequeñas. En una de ellas, similar en tamaño a la de una caja de zapatos, había más de 14 pájaros. Entre las aves decomisadas hay jilgueros, verderones, chamarices, canarios, inseparables, palomas, gallos de pelea y gallinas. Los jilgueros y verderones fueron puestos en libertad en los aparcamientos de la Jefatura de la Policía Local, en la Cartuja, y el resto trasladados al servicio zoosanitario.
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