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La Policía investiga un nuevo incendio en el Cortijo de Alcosa

Los vecinos denuncian ataques desde hace cinco años a un edificio con más un siglo

La huella de las llamas aún puede verse en la ventana derecha del cortijo, edificio de propiedad municipal. / Juan Carlos Vázquez
A. S. Ameneiro

17 de junio 2017 - 02:33

La Policía Nacional está investigando las causas de un nuevo incendio en el cortijo de San Ildefonso de Alcosa, sucedido el pasado domingo 4 de junio. Según testigos del suceso, una vez que los Bomberos lograron apagarlo, alguien volvió a incendiarlo horas después. La huella de las llamas en la fachada de una de las ventanas de la planta baja aún puede verse en el edificio. Según el parte de los Bomberos, el fuego provocó daños en cargaderos de madera. El cortijo se sitúa dentro del Parque Tamarguillo.

La asociación Movida Pro Parque Tamarguillo denuncia que este inmueble, una propiedad cerrada y sin uso del Ayuntamiento de Sevilla, con más de 100 años de antigüedad y el único ejemplo de arquitectura rural andaluza que hay en el entorno, viene sufriendo desde hace años "continuos atentados: robos, una decena de incendios, total abandono y desprotección y pérdida de elementos patrimoniales, tales como azulejos de valor y elementos arquitectónicos.

El inmueble ha sufrido robos, una decena de incendios y la pérdida de azulejos de valor

La entidad reitera que este edificio singular se encuentra seriamente amenazado. "Diversos intereses que atentan contra el patrimonio de todos los ciudadanos llevan un lustro atacando reiteradamente este edificio, sin que se hayan tomado medidas de protección sobre él; al contrario, se está abandonando a su suerte, como si lo que se pretendiese es buscar su ruina y posterior derribo", lamenta.

Por eso Movida Pro Parque reclama al Ayuntamiento que de manera urgente se tomen las medidas necesarias para proteger, conservar, restaurar y rehabilitar este edificio público e histórico para su puesta en valor y disfrute de los ciudadanos. Ubicado en el extrarradio de Sevilla, es el único ejemplo que queda en pie en la zona ya que otras grandes construcciones rurales, como las haciendas de Buena Esperanza, Hernán Cebolla y San Pablo, han desaparecido fruto de la especulación urbanística de las últimas décadas, añade la entidad vecinal.

Movida Pro Parque propone desde hace décacas convertir el cortijo en Centro de Interpretación de la Naturaleza del Territorio "y, de paso, restablecer el grave perjuicio creado contra esta asociación histórica del Parque Alcosa que durante años ha realizado una labor encomiable por el medio ambiente, el patrimonio cultural y el bienestar de los ciudadanos". Antes de su cierre hace años, los últimos moradores del edificio fueron los integrantes de la entidad Movida Pro Parque del Tamarguillo, que durante años se ocuparon de su mantenimiento y conservación, así como de darle una amplia y diversa actividad social y cultural. Hace unos años, esta entidad fue desalojada por el gobierno municipal del PP y el asunto llegó a los tribunales. La asociación se pregunta por qué esa celeridad del Ayuntamiento del PP por desalojarlos y sugiere que se debe a intereses especulativos para la construcción de la SE-35. El abrevadero, la antigua noria de tiro animal, la zahúrda o la casa de gañanes son estructuras constructivas vinculadas aún a este cortijo.

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