Movilidad peatonaliza el acceso al Parque de María Luisa por Isabel la Católica
La reordenación de una de las entradas del jardín histórico
El lunes será eliminado el tráfico desde la glorieta de San Diego hasta la Torre Norte de la Plaza de España
La carga y descarga estará regulada por bolardos abatibles
El acceso al Parque de María Luisa por la avenida de Isabel la Católica será peatonal desde el próximo lunes. La Delegación de Movilidad ha desbloqueado esta misma semana con la Subdelegación del Gobierno una medida en la que vienen trabajando los técnicos en los últimos meses y que eliminará el tráfico entre la glorieta de San Diego y la Torre Norte de la Plaza de España
Los vehículos no podrán acceder desde la glorieta al estar bloqueada la calzada por unos bolardos abatibles encastrados en el suelo. Estos postes de hierro, que ya fueron instalados por los operarios de Movilidad, estarán recogidos en los horarios permitidos para la carga y descarga. Aún se trabaja en un acuerdo con la Confederación de Empresarios de Sevilla (CES) sobre las horas en la que podrán estacionar los vehículos encargados de esta tarea. Sólo podrán llegar hasta la isleta que coincide en altura con las entradas de los establecimientos La Raza y el bar Citroen. La intención del equipo de Juan Espadas es evitar que esta zona sea invadida a diario por los coches privados, como hasta ahora. Además, se eliminará la zona de aparcamientos para que pueda ser usada por los peatones para caminar.
El acceso de los vehículos desde la calle Gran Capitán estará restringido por unos macetones con vegetación de gran porte. Sólo podrán acceder los taxis, coches de caballo y los vehículos acreditados. Movilidad ha realizado este plan de reordenación del tráfico de todo el entorno contando con el visto bueno de los taxistas y los cocheros, que pasarán a tener la parada junto a la reja de entrada que existe al final de Isabel la Católica. Las plazas de aparcamientos en esta calle se quedarán en 38 y se permitirá un nuevo un giro semafórico a la izquierda en dirección a la glorieta de San Diego por la Avenida de Portugal.
Esta ampliación del Parque de María Luisa se realiza una década después de la promesa que hizo Alfredo Sánchez Monteseirín durante su tercer mandato para peatonalizar la vía (impidiendo la circulación tanto a coches oficiales como privados y autobuses turísticos) y devolverle el aspecto original que tuvo durante la Exposición Iberoamericana de 1929. La intención de Parques y Jardines era ajardinar completamente la zona con albero y arboles de medio porte, así como recuperar las antiguas rosaledas. Además, el Ayuntamiento quiso llegar a un acuerdo con los puestos de souvenirs que se siguen ubicando a la entrada de la Plaza de España para su reubicación en unos quioscos diseñados de acuerdo con el entorno monumental. La inversión prevista era de 240.000 euros.
Los vehículos salieron del corazón del parque en 2007 después de que cerrase al tráfico la avenida Rodríguez de Casso. Esta operación provocó algunos cambios, ya que los coches procedentes de la Avenida de la Palmera o Los Remedios con destino al Prado de San Sebastián volvieron a pasar por la avenida de María Luisa al recuperar su doble sentido de circulación. El desvío del tráfico por el Parque de María Luisa se produjo para facilitar un acceso hacia el Prado mientras se ejecutaba la estación del Metro ubicada en la avenida Carlos V, que se cortó parcialmente a la circulación, lo que supuso también el desvío por la avenida de Portugal para aquellos vehículos que quisieran acceder hacia Nervión.
Una inversión superior a los 3,5 millones de euros en su mandato. El alcalde socialista hizo un balance de las diferentes actuaciones realizadas en los últimos cuatro años. Espadas presumió de destinar esa cuantía a importantes mejoras en este emblemático espacio de la ciudad. Las últimas, las mejoras en los accesos y la pavimentación de los caminos de albero, que suman 420.000 euros.
Desde el pasado verano la Gerencia de Urbanismo está realizando una actuación en los cuatro accesos al parque: la Plaza de América, las dos entradas de Isabel La Católica y la existente en la Borbolla frente a Felipe II. En todos los casos se encuentran en mal estado y no cumplen con las medidas de accesibilidad, por lo que uno de los ejes de este proyecto es garantizar la eliminación de las barreras arquitectónicas, como informó este periódico. Estas obras cuentan con una inversión de 100.000 euros. Además, el área de Parques y Jardines realiza desde enero las obras de pavimentación y mejora de todos los caminos de asfalto de este espacio verde con un presupuesto de 321.000 euros y un plazo de ejecución de seis meses.
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