El aumento del consumo eléctrico por el turismo obliga a reforzar la red en el centro

La ciudad cuenta con una nueva obra de envergadura desde esta semana en una de las zonas claves de tráfico. El aumento del consumo eléctrico debido a la recuperación del turismo y la reapertura de los comercios tras los peores momentos de la pandemia del coronavirus ha obligado a Endesa a iniciar el reforzamiento de la red del centro que discurre entre la calle Arjona y la Plaza Nueva para evitar cortes en el suministro.

La intervención de la empresa eléctrica ha arrancado en la calle Sánchez Barcaiztegui, que une Arjona con Marqués de Paradas. Las calicatas abiertas serán usadas para la renovación de la línea de media tensión de 20 kilovatios que aumentará la capacidad del servicio ante la fuerte demanda y renovará unas instalaciones que ya cuentan con una antigüedad considerable. Desde Endesa apuntan que se trata de unas obras complejas al discurrir por varias calles del casco antiguo como Canalejas, Cristo del Calvario, San Pablo o Méndez Nuñez. La previsión apunta que los trabajos estarán finalizados antes de la vuelta de las vacaciones de verano tras una inversión que ronda los 570.000 euros y en el que participarán un equipo formado por 30 personas.

Los técnicos de Endesa han trabajado de la mano de la Gerencia de Urbanismo y la delegación de Movilidad para establecer el diseño de la reurbanización o los cortes de tráfico. Las condiciones del trazado y la ejecución a tener en cuenta en los distintos tramos son varias. En Sánchez Barcaiztegui, la canalización a ejecutar debe discurrir por la calzada y reponerse en toda su anchura con una capa del mismo espesor y características que la existente. En la calle Marqués de Paradas, la canalización debe discurrir por la banda de aparcamiento y reponerse desde el borde exterior de la calicata a la línea de bordillo con una capa del mismo espesor y características.

El cruce de Marqués de Paradas debe ejecutarse a la altura del paso de peatones de la calle Marqués del Duero, el cual deberá fresarse en toda la anchura de la señalización horizontal existente y reponerse la capa en esa zona. El cruce de la calle Julio César se realizará pasada la señalización horizontal del paso de peatones y reponerse desde el borde exterior de la calicata hasta el inicio de la señalización horizontal del paso de peatones. En la calle Canalejas, en el tramo entre Julio César y Gravina, la canalización discurrirá por la calzada debiéndose reponer el carril afectado en toda su anchura del mismo espesor y características. Mientras tanto, en el tramo entre Gravina y Cristo del Calvario la canalización a ejecutar discurrirá por la banda de aparcamiento y será repuesto en toda su anchura con el mismo espesor y características.

La intervención de la eléctrica seguirá por Cristo del Calvario, donde la canalización debe discurrir por la calzada y reponerse en toda su anchura con el mismo espesor y características. La traza de la canalización deberá discurrir por la banda de aparcamiento. En la calle San Pablo, la canalización debe discurrir por la banda de aparcamiento y reponerse con adoquines de granito procedentes del levantado sobre losa de hormigón. En la calle Méndez Núñez, la canalización debe discurrir por la calzada y reponerse en toda su anchura con capa del mismo espesor y características. La traza de la canalización deberá discurrir por la banda de aparcamiento. Este tramo deberá ejecutarse entre los meses de julio y agosto.

La última parte de la canalización que estaba prevista en las calles Madrid y Bilbao (junto a la Plaza Nueva) ya se ejecutó el año pasado para resolver una avería en la zona. Urbanismo recuerda a Endesa en el expediente que debe reponerse la señalización horizontal en todo el ámbito de las obras y adecuarse a la normativa de accesibilidad todos los pasos de peatones que se vean afectados por la canalización.

En ese informe del servicio de proyectos y obras de la Gerencia se señala que la empresa eléctrica debe comunicar con 96 horas de antelación como mínimo la fecha de inicio de las obras, así como el día de finalización de las mismas a fin de realizar la correspondiente inspección. Sobre el cumplimiento de la ordenanza, deja claro que el relleno de la zanja debe realizarse con albero, “no siendo posible utilizar de relleno las tierras procedentes de la excavación, las cuales deberán retirarse a vertedero una vez sean extraídas de la zanja”. Además, detalla que la reposición del pavimento de cualquier zona se realizará con los mismos materiales que los existentes en calidad, formato, color y textura, tanto en los distintos estratos ocultos como en los acabados exteriores; y que previo al inicio de las obras, deberá protegerse el arbolado que pueda verse dañado conforme a lo establecido en las ordenanzas de Parques y Jardines. “El borde de la excavación no se realizará nunca a una distancia menor de 150 centímetros del eje del tronco del árbol afectado”, finaliza.