Nuevo acceso ferroviario al Puerto: Un ramal para evitar maniobras

Un ramal para evitar maniobras innecesarias. Los trenes de mercancías que quieren acceder al Puerto de Sevilla deben circular hasta la estación de la Salud, Dos Hermanas o Utrera y realizar operaciones de retroceso para entrar en las instalaciones portuarias. El proyecto constructivo para solucionar este importante obstáculo ya se encuentra redactado. La Autoridad Portuaria va a desarrollar ahora una modificación para minimizar la afección de la obra al tráfico de ferrocarriles, ya que la ejecución inicial implicaba cortes de tráfico prolongados. Una vez se altere el trazado, este será supervisado por Administrador de Infraestructuras Ferroviarias (ADIF) antes de sacar a licitación las obras.

Mediante la actuación que contempla el proyecto se pretende construir un nuevo ramal ferroviario de dos kilómetros en ancho ibérico y una vía única destinado al tráfico de mercancías que parta directamente de la variante de La Negrilla y conecte con el actual acceso al Puerto de Sevilla a la altura del viaducto de cruce sobre el río Guadaira, accediendo de esta manera al suelo portuario sin tener que pasar por la estación de la Salud o Utrera. En la primera dan la vuelta los trenes de 300 metros. En la segunda, los de 500 metros. La zona de actuación se localiza al sureste de la ciudad, en la confluencia entre la variante de La Negrilla y la línea Sevilla-Cádiz.

En el proyecto constructivo se explica que, en las conversaciones mantenidas con el Ayuntamiento de Sevilla, se valoró la necesidad de actuar en la zona del cruce sobre la Avenida de Jerez (antigua N-IV), de manera que el nuevo acceso ferroviario resulte compatible con los viarios previstos en el PGOU. Para eso se ha previsto diseñar una nueva estructura con la posición de pilas y estribos que viabiliza el desarrollo posterior de estos viales, a la vez que dota a las zonas urbanas adyacentes al ramal de la necesaria permeabilidad transversal.

El inicio de la actuación se ha fijado en las inmediaciones del arranque de la estructura actual sobre el Guadaira. En el tramo siguiente al cruce con la Avenida de Jerez se ha ampliado el viaducto dando continuidad al anterior para el cruce sobre la aceitunera y la línea Sevilla-Cádiz. El tramo final comparte plataforma con el futuro desdoblamiento del cierre sur de la línea circular de Cercanías. Este trecho se ha proyectado con los criterios de diseño necesarios para que resulte lo más compatible posible con los futuros desarrollos urbanísticos de El Pítamo, a la vez que consiga el desarrollo suficiente para limitar la pendiente máxima a un 14%. La descripción general de la actuación destaca que, cerca de la conexión del nuevo acceso al Puerto, se define un mango de seguridad de 20 metros de longitud útil para evitar que, en caso de incidencia, un tren procedente del Puerto se introduzca accidentalmente en las vías generales de la variante de La Negrilla.

En el proyecto aparecen distintas soluciones para las estructuras que afectan al ramal. El paso inferior de la vereda del Rayo se resuelve mediante una estructura en pórtico que sirve para la plataforma compartida entre el desdoblamiento del cierre del anillo sur y el nuevo acceso al Puerto. Para el viaducto de 642 metros sobre la Avenida de Jerez y la línea Sevilla-Cádiz se proyecta con 26 vanos. La estructura situada sobre la variante de La Negrilla se resuelve mediante una estructura en pérgola. La longitud es de 24 metros. Para la correcta ejecución de las obras, ADIF propone la reposición de un servicio de abastecimiento, una línea de telecomunicación, dos tuberías de gas, diez líneas eléctricas de baja y media tensión, y una línea eléctrica de alta tensión.

Adif publicó hace siete meses en el suplemento al Diario Oficial de la Unión Europea una alerta sobre la inminente licitación de la obra del nuevo enlace ferroviario dirigida a las empresas interesadas en presentarse. En el documento, se citaba que la licitación se hará por importe de 16,1 millones de euros, sin incluir IVA, lo que elevaba la cantidad total incluyendo IVA a 19,5 millones de euros. Adif también aclaraba que el plazo de ejecución de la obra será de 20 meses a contar desde la adjudicación. Tras el visto bueno al proyecto, el proyecto saldrá a licitación por un importe similar. Un visto bueno que ya tiene del Ayuntamiento de Sevilla. “La solución proyectada es coherente con lo previsto en el Plan General y responde a lo definido en el proyecto básico, informado favorablemente por la Gerencia de Urbanismo”.

La Autoridad Portuaria entiende que el nuevo acceso ferroviario es una actuación fundamental y estratégica para el desarrollo de este enclave, ya que permitirá que el transporte ferroviario, hoy en día en crecimiento en el Puerto, gane en competitividad y eficiencia y se reduzcan los tiempos de paso del tren (aproximadamente unas 2 horas y 30 minutos). Además, detallan que dotará a la infraestructura portuaria de las condiciones necesarias para que la entrada al recinto portuario pueda realizarse sin condicionantes de longitud de los trenes y carga. El Puerto estará preparado para acoger trenes de hasta 750 metros de longitud una vez que la red ferroviaria estatal esté adaptada.

Detalla que la entrada de trenes al Puerto debe hacerse en coordinación con el paso de trenes de Cercanías, por lo que los horarios para el transporte de mercancías se limitan a la madrugada. “Con esta actuación, se dotará al Puerto de un acceso directo que favorecerá las conexiones por tierra del puerto y optimizará sus condiciones logísticas”. La Autoridad Portuaria explica que gracias a esta actuación se promueve la multimodalidad (barco, tren y camión) que, junto a la ubicación estratégica, es una de su principales fortalezas. El Puerto de Sevilla es el principal motor económico de la región metropolitana y cuenta con un área de influencia que cubre la provincia, las regiones de Andalucía y Extremadura, y el resto de la península a través de los corredores ferroviarios a Madrid, Valencia y Tarragona.