Nuevas voces críticas en las agrupaciones del PSOE tras las elecciones municipales

Nuevas voces críticas en el PSOE de Sevilla tras las elecciones municipales. El vicesecretario de la agrupación de San Jerónimo, Antonio Ocaña, confirmó ayer a este periódico que son siete los militantes que han abandonado su cargo en dicha agrupación por discrepancias con la forma de actuar del actual secretario, Evaristo Troya. En concreto, junto a Ocaña, han dimitido los responsables de política municipal, igualdad, comunicación y tres vocales de la Ejecutiva, en total un tercio de la misma. Entre ellos, el líder vecinal Ángel Vallano y su esposa.

El argumento de estos siete militantes es que se han sentido marginados durante el pasado proceso electoral. No obstante, según apuntó ayer a este periódico Ocaña, todos han trabajado en bloque para respaldar al candidato Juan Espadas en atención a una orden dada por la dirección del PSOE en vista al difícil escenario en que se movía el partido, que necesitaba presentarse fuerte y unido para movilizar a su electorado. De hecho, ésta ha sido la estrategia de la campaña de Espadas que, en San Jerónimo, ha logrado imponerse en prácticamente todas las mesas electorales. En el distrito al que pertenece la agrupación, Macarena Norte, el PSOE acaparó el 43% de los votos y fue el único, junto a Cerro-Amate, donde los socialistas fueron mayoría.

Los siete militantes que han presentado su dimisión son muy afines a la actual secretaria de Organización del PSOE andaluz, Susana Díaz, y se confiesan seguidores de la corriente oficialista dentro del partido. Por lo tanto, insisten en que las discrepancias surgidas en el seno de la agrupación son de carácter personal, contra la figura del secretario, al que acusan de velar más por sus intereses particulares que por los del partido.

Troya, al igual que todos los secretarios de agrupaciones, se quedó fuera de la lista electoral, una decisión que avivó la polémica entre los militantes. Junto a Alfonso Mir, de la agrupación Sur, y Francisco Fernández, de Cerro-Amate, muchos esperaban que Troya estuviese en las quinielas de Espadas. Quizás por ello, el candidato se ha cuidado de mencionarlos en varios mítines, consciente de la necesidad de mantener el respaldo de dichas agrupaciones y su militancia.

Por San Jerónimo, el único que entró en la candidatura fue David Guevara, secretario de Organización de dicha agrupación y que ocupaba, en teoría, uno de los puestos de salida, el 14. Guevara, en nombre de la directiva de la agrupación, explicó ayer a este periódico que respetan la decisión adoptada por los siete militantes y destacó que los que han dimitido representan sólo a un tercio de los miembros de la ejecutiva, por lo que no se pone en riesgo la continuidad de la misma, "que seguirá trabajando por el barrio, con el que tiene mucha implicación".

El malestar entre la militancia en dicha agrupación ya se puso de manifiesto en la proclamación como candidato de Juan Espadas. De hecho, en San Jerónimo hubo elevadísimo porcentaje de militantes que no acudieron a la votación en señal de protesta. Las siete dimisiones ya han sido comunicadas, por carta, a la dirección provincial y regional del PSOE.

Este movimiento se produce después de que en Bellavista se desatara hace unas semanas otra crisis, con amago de dimisión en bloque incluida, dadas las discrepancias con la estrategia electoral socialista. Esta crisis desembocó el mismo 22-M en una carta del secretario de dicha agrupación, Raúl Medinilla, que abrió una corriente crítica al anunciar que optará a la dirección provincial del partido.