Muere un motorista de la Policía Local tras ser arrollado por un coche
El agente Sergio Rodríguez Prat tenía 27 años y pertenecía a la última promoción que tomó posesión el pasado mes de julio.
Un joven motorista de la Policía Local de 27 años falleció a última hora de la tarde de este lunes víctima de las heridas sufridas tras ser arrollado por un vehículo particular en el cruce entre la Ronda de María Auxiliadora y la calle José Laguillo. El agente Sergio Rodríguez Prat, incorporado en la última promoción, se encontraba realizando un servicio y conducía junto a otros compañeros por el carril bus de la Ronda en dirección a la Macarena. El vehículo, un Toyota Corolla de color gris plata, se encontraba haciendo el giro desde María Auxiliadora para acceder a José Laguillo. La Policía trataba de averiguar a última hora de la noche qué había deparado el choque e investigaban si alguno de los dos vehículos se había saltado un semáforo en rojo, aunque la hipótesis más sólida era que había sido la conductora.
El suceso tuvo lugar alrededor de las 18:50, según relataron a este periódico fuentes presenciales. "Parece que el coche que conducía una muchacha ha girado en el cruce y se ha llevado la moto por delante", explicó la empleada de una cafetería. Hasta la zona se desplazaron varios equipos del 061, hasta cuatro ambulancias, además de otra unidad enviada por los bomberos, ya que el agente había quedado atrapado. En la propia calle se llegó a instalar un pequeño hospital de campaña en el que fue atendido el policía local.
Los dispositivos sanitarios desplazados hasta el lugar estuvieron reanimando al agente hasta poco antes de las ocho de la tarde, cuando fue trasladado en estado crítico por una de las ambulancias del 061 hasta el Hospital Virgen del Rocío, donde minutos después se certificó su fallecimiento. Otro de los testigos, el dueño de una tienda situada en el mismo cruce, señaló a este periódico que vio cómo el coche se llevaba por delante al motorista: "Ha sido todo muy rápido. Yo estaba hablando por teléfono y miraba para la calle cuando lo he visto". Esta misma persona contó que los sanitarios se llevaron mucho tiempo aplicando técnicas de reanimación al policía hasta que consiguieron recuperarlo lo suficiente como para poder trasladarlo al centro hospitalario. Hasta el lugar del suceso se trasladaron numerosos compañeros del agente, además del delegado de Seguridad y Movilidad del Ayuntamiento, Juan Bueno, quien en todo momento se estuvo interesando por el estado del joven. Por su parte, el alcalde, Juan Ignacio Zoido, se desplazó hasta el Virgen del Rocío para acompañar a los familiares y compañeros del policía en el duro trance. El propio alcalde ofreció a la familia la sede del Ayuntamiento para instalar la capilla ardiente, a lo cual, según informa Europa Press, accedieron los allegados del fallecido.
El accidente provocó un importante caos circulatorio. La Policía desvió el tráfico procedente desde la Macarena por la Carretera de Carmona. Buena parte de la Ronda se atascó, llegando los coches, a las 19:30, hasta la Basílica de la Macarena. Los autobuses también fueron desviados por José Laguillo.
El policía fallecido formaba parte de la última promoción de 102 agentes que entró en servicio a principios del pasado julio. Es el segundo agente municipal de Sevilla que fallece en acto de servicio. El 25 de julio de 1978 José Luis Luque falleció después de que cuatro días antes fuera tiroteado por dos atracadores en la calle Cuna.
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