Movilidad tiende la mano para buscar soluciones en la zona azul

El Ayuntamiento alega que negociará con quienes presenten sus propuestas. Los trabajadores y la oposición crean un frente.

Un afectado coloca un cartel de protesta en un establecimiento de Bami.
Un afectado coloca un cartel de protesta en un establecimiento de Bami.
Redacción

27 de junio 2014 - 05:03

La ampliación de la zona azul en la capital sigue siendo un tema por resolver. Las protestas continúan y se ven pocos visos de solución, a pesar de que el Ayuntamiento de Sevilla insistió este jueves en su "política de mano tendida" para llegar a un acuerdo con los afectados que critican la medida.

En concreto, según explicaron fuentes municipales, se negociará con todos los colectivos y afectados que se dirijan al gobierno municipal y, como ejemplo, hicieron referencia a los trabajadores de los hospitales de Bami, a los que se les pidió, hace un mes, desde Movilidad que presentasen una propuesta concreta de sus necesidades y, al parecer, nunca lo hicieron. Según fuentes de dicha delegación también se cerró un acuerdo con los comerciantes de Bami y, en estos momentos, se está a la espera de concretar cuántos necesitarán el abono.

Desde el gobierno local se afeó este jueves que los afectados presenten sus protestas ante la prensa y no en los despachos municipales. Y, una vez más, el delegado de Movilidad, Juan Bueno, criticó ayer la estrategia de la oposición en esta polémica: "Resulta sorprendente escuchar al PSOE y a IU cómo defienden la supresión de la zona azul, cuando ellos cuando gobernaban eran los que pretendían llenar Sevilla con el triple de la propuesta planteada por el PP de zona azul".

Tanto el PSOE como IU se unieron este jueves en un frente común, junto con el secretario general de CCOO en Sevilla, Alfonso Vidán, a una representación sindical de los trabajadores afectados por la zona azul. Esta plataforma mantuvo este jueves un encuentro para exigir la paralización de las nuevas plazas y la búsqueda del consenso con las personas afectadas, una postura que se contradice con la política de mano tendida que defendió ayer el PP. Según el sindicato, sólo en Bami los empleados afectados ascienden a 15.000 personas. Y recordó que, además, en su momento el Consejo Económico y Social de Sevilla (CESS) ya manifestó por unanimidad "el rechazo a estas medidas, del modo en el que se están haciendo, especialmente porque se hace sin contar con los afectados".

Igualmente, Espadas consideró "triste" que la iniciativa política "más importante" de los tres años de mandato de Zoido sean "las casi 8.000 plazas de zona azul en Sevilla, que generarán un efecto directo en los bolsillos de los ciudadanos". Así, apuntó que Zoido dice que "ha consensuado y convencido a los vecinos, pero una muestra evidente de sus mentiras está aquí", e instó al alcalde a que sea "capaz de rectificar" en el Pleno, porque "así acertará al no estar consensuado".

La decisión, según el PSOE, "no ha sido justificada por estudios de movilidad. En la misma línea, el portavoz de IU insistió en que las plazas de zona azul tienen que corresponder a políticas de movilidad: "Zoido enmarca la zona azul en su voracidad recaudatoria, como un instrumento para conseguir más dinero de los sevillanos".

De las 3.685 plazas nuevas de zona azul, 622 se califican como de Muy Alta Rotación (MAR), lo que significa que los residentes no pueden aparcar usando el bono de 80 euros al año hasta las 14.00. Según criticó este jueves la oposición, es el precio por hora más caro (1,25 euros) y el tiempo máximo de aparcamiento es de sólo 60 minutos. En Bami, donde el horario de MAR es de 8:00 a 14:00, hay 247 plazas y, entre otras, están las del a plaza Rafael Salgado, residencial e interior. Los afectados también han criticado que sólo se expida una tarjeta de residente por domicilio.

No obstante, Juan Bueno reiteró este jueves que hay consenso y que en la junta municipal del distrito Sur fue retirada la propuesta para la eliminación de esta medida gracias al voto de los vecinos.

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