Monteseirín reta a Viera al modificar su equipo sin el consenso del PSOE

El alcalde de Sevilla, Alfredo Sánchez Monteseirín, comunicará hoy al Pleno del Ayuntamiento la propuesta de reforma de su gobierno después de que a las 19:00 de ayer firmase el anunciado decreto de remodelación de su equipo, elaborado sin consultar a la Ejecutiva del PSOE de Sevilla que dirige José Antonio Viera y en el que relega al ex delegado de Urbanismo, Emilio Carrillo, a la delegación de Recursos Humanos. La decisión del alcalde, que mantiene el apoyo de nueve ediles frente a siete vieristas, es un órdago en toda regla que prolonga las graves tensiones existentes en el seno del partido en Sevilla y que abre grandes incógnitas sobre el futuro de los socialistas en el Consistorio.

La remodelación del gobierno ha sido notificada y trasladada a los 16 concejales socialistas (catorce electos y dos más en virtud de la ley de Grandes Ciudades) pero no consensuada: impuesta, en suma, ya que el alcalde ha hecho valer su autonomía al frente del Consistorio al margen del partido y de la dirección provincial.

La colocación -ya anunciada- de Alfonso Rodríguez Gómez de Celis en Urbanismo será compensada con la cesión formal al bando vierista del control de las empresas municipales, ya que el hombre de confianza del regidor, Manuel Marchena, continúa al frente de la gestión de la Agrupación de Interés Económico (AIE). Juan Antonio Martínez Troncoso, alineado con la postura oficialista, seguirá con Innovación pero ostentará la vicepresidencia de la AIE, órgano que lleva consigo el control de casi un tercio del presupuesto merced a los 665 millones anuales consignados entre Tussam, Lipasam, Emasesa y Emvisesa.

Esta concesión a los oficialistas se acompaña, además de la devolución a Teresa Florido, delegada de Salud y Consumo, de las competencias en drogadicción retiradas hace unos tres meses. Alberto Moriña deja la delegación de Cooperación al Desarrollo para hacerse cargo de Patrimonio y Contratación, mientras que el resto de ediles señalados con Viera mantendrán las mismas competencias.

Carrillo es la excepción. La Delegación de Recursos Humanos ha sufrido un constante rebote y rechazo por parte de los concejales hasta acabar en Carrillo, según afirman fuentes del gobierno local. La escasa capacidad de gestión y de poder de esta concejalía -funcionarios, personal laboral, portal del empleado y prevención laboral- en manos de Carrillo, uno de los concejales más valorados y respetados por los ciudadanos, se interpreta como el castigo definitivo de la cúpula municipal por su traición a la causa de Monteseirín y su adscripción política con Viera, lo que derivó en la retirada de la candidatura de los renovadores al congreso provincial de julio pasado.

La respuesta de Carrillo a esta ofensa está por llegar. Dependiendo de lo que haga, los acontecimientos se precipitarán hacia un lado u otro. Si se niega a tomar recursos Humanos, podría forzar una dimisión en bloque del sector vierista en el Consistorio, que conservaría sus actas de concejal para poder obstaculizar la gobernabilidad y rechazar las iniciativas en pleno.

Carrillo ya hizo saber ayer su nula predisposición a aceptar el nuevo cargo, cansado, dicen, del escarnio al que se está viendo sometido por sus propios compañeros de partido. Aún así, podría doblegarse y aceptar el mandato del regidor si cuaja el plan b que persigue la dirección del PSOE provincial para conquistar parcelas de poder en Plaza Nueva, máxime tras el abrumador respaldo que Viera obtuvo en el congreso de julio. El líder provincial quiere el control del Grupo Municipal del PSOE y poner a Emilio Carrillo como portavoz en lugar de Celis, al que Monteseirín señala como su futuro heredero político. La apuesta de Viera sería la primera batalla de una guerra para sumar más parcelas de poder institucional, como por ejemplo la presidencia del Pleno.

La remodelación del gobierno recupera parte del bosquejo inicial que Monteseirín frenó en vísperas del congreso del PSOE provincial. Celis toma Urbanismo, continúa con Presidencia y, hasta anoche, conservaba la portavocía del grupo socialista. Nieves Hernández deja Convivencia y Seguridad en manos de Alfonso Mir y gestionará Hacienda. Francisco Fernández sigue en Movilidad, Rosamar Prieto suma Turismo a Fiestas Mayores, Ana Gómez conjuga Bienestar Social y Cooperación al Desarrollo, Maribel Montaño sigue con Cultura y la Portavocía, Encarnación Martínez con Medio Ambiente, Eva Patricia Bueno en Parques y Jardines y Dolores Rodríguez en Mujer.