María Dueñas corrió la Sevilla-Los Palacios

La Sevilla-Los Palacios es una media maratón que ideó el periodista Lorenzo Muñoz, un catalán que se afincó en Sevilla para darle momentos de gloria a los mal llamados deportes modestos. Este fin de semana la escritora María Dueñas ha participado en la prueba Los Palacios-Sevilla. Invitada por la Fundación Caja Rural de Utrera, el viernes y sábado participó en sendos encuentros literarios en las poblaciones de Utrera y Los Palacios y Villafranca, respectivamente. En ambos con el periodista Jesús Vigorra como interlocutor. Se ha vuelto a alojar en el hotel Inglaterra, esta vez con muchos más huéspedes que cuando vino con la promoción de su novela ‘Sira’, con el hotel bajo mínimos en una de las fases más críticas de la pandemia. De hecho, el año pasado no se corrió el maratón de Sevilla. Ayer este clásico del atletismo volvió a la normalidad y María y su marido, Manolo Castellanos, que alguna vez corrió el maratón de Sevilla, tuvieron que ir a pie desde el hotel Inglaterra, en la Plaza Nueva, hasta la estación de Santa Justa, con la ciudad cortada, sin taxis ni autobuses.

La escritora se reunió con algunos amigos paisanos residentes en Sevilla en el restaurante Barbiana, en la calle Albareda, antigua Catalanes. Es fiel a la manzanilla de este consulado de Sanlúcar en Sevilla y a sus tortillitas de camarón. Ya se pueden ver en la ciudad carteles de la adaptación de su novela El tiempo entre costuras, que ya se convirtió en una serie de televisión de mucho éxito, a un musical. Se podrá ver los días 26, 27 y 28 de mayo, una semana antes del Domingo de Pentecostés.

Es María Dueñas una autora versátil. Con cuatro novelas, la última un regreso al personaje principal de la primera, ya puede oírse su último trabajo, un audible titulado Jodidísimas, una “dramedia marbellí” con voces tan reconocibles como las de Lolita Flores, Cayetana Guillén Cuervo o Anne Igartiburu y dirigida por Mona León Siminiani.

De Utrera a Los Palacios. Dos motores de la cultura del Sur. Una celebra todos los años el Potaje Gitano; la otra, el Festival de la Mistela. Una es la cuna de Fernanda y Bernarda de Utrera y toda su estirpe, de Bambino (a quien anoche dedicó la 2 de Televisión Española su programa Imprescindibles); la otra, patria chica de Manolo Curao, uno de los más reputados profesionales de la crítica flamenca. En Utrera nacen Los Centellas y en Los Palacios (los recuerdo como teloneros de Baldomero Torres y sus Cuchillos Afilados) los No me pises que llevo chanclas, artífices del agropó. Utrera es el epicentro cultural de las historias de dos de sus hijos más preclaros, los hermanos Joaquín y Serafín Álvarez Quintero, rescatados por los Compadres de cierto ostracismo. En Los Palacios nació Joaquín Romero Murube, definidor de los abismos claros de Sevilla, conservador del Alcázar. En esa localidad, el año que cumplió los 90 años, le dieron el último homenaje a Caballero Bonald, el premio Cervantes del Campo de Agramante. Dos ciudades-Estado del flamenco, de la gracia y también canteras del fútbol más exquisito. De Utrera son Joaquín Caparrós, seleccionador de Armenia, y Dani Ceballos, allí nació José Antonio Reyes, torero del borceguí. Los Palacios dio a Jesús Navas y generaciones más jóvenes a Fabián y a Gavi, que disputaron en ambos bandos el último Barcelona-Nápoles. A María Dueñas la agasajaron con mostachones de Utrera y con piononos de albures en Los Palacios, el Greenwich Village de los tomates.

Con Jesús Vigorra habló del papel de la mujer en sus novelas. Una bella redundancia, porque Sira Quiroga eclipsa al resto de personajes masculinos. En su última novela esta heroína literaria, costurera y espía, acompaña a Evita Perón en su viaje a España, del que en 2022 se cumplen 75 años. Aquí recibió la Gran Cruz de Isabel la Católica, que el año pasado le entregaron a la arabista Lola López-Enamorado, buena amiga de María, anfitriona de sus novelas en todas las ciudades del norte de África donde llevó las sedes del Instituto Cervantes. El director de esta entidad, Luis García Montero, ha anunciado en la capital británica una ruta del exilio londinense de los republicanos españoles. Un adelanto de esa ruta y de ese selecto elenco de exiliados está en la novela Sira de María Dueñas, en una recepción en la que aparecen Luis Cernuda, Gregorio Prieto, Rafael Martínez Nadal, Arturo Barea o el propietario de Atlantic-Pacific Press, la agencia en la que trabajó Chaves Nogales.

María Dueñas, asidua a las ferias del Libro de Sevilla, volverá cuando se represente el musical basado en la novela que sacó del anonimato a una profesora que daba clases de Inglés en Cartagena. María está encantado con el éxito de su paisana Ana Iris Simón, autora de Feria, portada de una Mancha que es “un océano de esparto”.