La Junta no renovará el contrato de comedor escolar a las empresas con sanciones

La Junta de Andalucía no renovará el contrato de comedor escolar a las empresas adjudicatarias que tengan expediente sancionador. Se trata de unos de los requisitos establecidos en la nueva normativa con la que la Consejería de Educación pretende mejorar la calidad y llegar a un mayor número de alumnos beneficiarios de este servicio.

Durante los últimos cursos han sido bastante frecuentes las quejas de las familias por los comedores escolares. Tanto en la cantidad que se servía a sus hijos como por la calidad de la comida. El nuevo consejero de Educación, Javier Imbroda, quiere acabar con esta situación. O al menos, paliarla. Por tal motivo, ha fijado una serie de requisitos que han de cumplir las empresas que se hagan con este servicio.

Uno de ellos es estar libre de sanciones. En caso de que durante el mantenimiento del contrato la Agencia Pública Andaluza de Educación -ente encargado de supervisar el comedor escolar- abra algún expediente sancionador por la prestación del servicio, no se renovará la adjudicación. Para ello resultará fundamental cumplir con el programa de seguimiento que pondrá en marcha la mencionada agencia para identificar qué menús son rechazados por los alumnos y las causas.

Entre los requisitos exigidos se encuentra la inclusión diaria de verdura y fruta fresca, el uso del aceite de oliva virgen extra, una mayor presencia de pescado que de carne, limitar la fritura y precocinados y optar siempre por la dieta mediterránea.

Una de las condiciones que mayor valor tendrán a la hora de hacerse con uno de estos contratos será la cercanía de la cocina de las empresas con los que centros educativos a los que pretendan prestar el servicio. Está proximidad pasará de los 10 puntos actuales (sobre 100) a 30. Con este cambio se pretende que la comida no necesite tanto tiempo de congelación, favorecer la economía local y reducir el impacto ambiental al disminuir el recorrido de los vehículos de transporte.

Las empresas adjudicatarias estarán obligadas a realizar actividades lúdicas previas o posteriores a las comidas. Los ejercicios tendrán carácter pedagógico, pues servirán para que los menores aprendan las nociones básicas de la alimentación saludable y la importancia del deporte.

Otra cuestión importante concierne al mínimo de monitores de los que han de disponer a la hora de prestar el servicio. Habrá uno por cada 15 comensales de segundo ciclo de Infantil (de tres a seis años de edad), por cada 25 de Primaria y por cada 35 en la ESO.

En total, el próximo curso serán 108 colegios sevillanos los que cuenten con comedor. De ellos, nueve lo tendrán por primera vez a partir de septiembre. Se trata del Reina Fabiola y el San Mateo, en Alcalá de Guadaíra; Valle de la Osa, en Constantina; Hipólito Lobato, en Coria del Río; José Cortines Pacheco, en Lebrija; San José de Calasanz, en Lora del Río; Maribáñez, en Los Palacios; Nuestra Señora del Carmen, en Guillena; y la escuela infantil Puerta, en Osuna. La Delegación territorial de Educación estima que con las nuevas condiciones se beneficien 14.409 alumnos de este servicio.