La Junta ve inoportuna la propuesta municipal para cobrar a los turistas

El rechazo del consejero dificulta el proceso El Ayuntamiento mantiene el debate tras recibir adhesiones de empresarios y del alcalde de Granada

Dos turistas consultan un mapa en el casco histórico de Sevilla.
María José Guzmán

22 de septiembre 2016 - 05:03

La Junta de Andalucía se pronunció ayer en contra de la implantación de una tasa turística en Sevilla, tal y como apuntó ayer en este periódico el delegado municipal de Turismo, Antonio Muñoz. Después de que el Ayuntamiento de Sevilla abriese el debate con dichas declaraciones, y tras haberse planteado el tema anteriormente en el seno del sector, el Ejecutivo andaluz aseguró que no es "el momento oportuno" para realizar dicho planteamiento, lo que dificulta notablemente la discusión que desde el propio gobierno local se pretende avivar para buscar un consenso en torno a esta medida. El principal argumento esgrimido por el titular de Turismo de la Junta, Francisco Javier Fernández, es que la tasa turística podría poner en riesgo la competitividad de la oferta, un extremo rebatido por el propio Ayuntamiento y por numerosos agentes del sector turístico basándose en la experiencia de otras ciudades españolas y europeas que cuentan con dicha tasa y siguen sumando turistas.

De cualquier manera, Fernández matizó que el Gobierno andaluz "no tomará ninguna decisión que conlleve gravar la actividad turística y aún menos si ésta no parte de un proceso de participación y consenso con todos los actores de la industria". De hecho, la intención del Ayuntamiento de Sevilla es continuar con el debate abierto para lograr dicho consenso necesario para, entre otras cosas, que la Junta de Andalucía reconsidere la propuesta, pues sin su visto bueno es imposible su aplicación, puesto que debe ser una ley autonómica la que regule dicha tasa. Y así lo hizo ver ayer el delegado municipal tras lanzar la propuesta.

Si bien no existe en estos momentos una unanimidad en el sector, pues la oposición está principalmente en los hoteleros y, en menor medida, en los hosteleros, hay una corriente creciente de empresas turísticas que sí ven con buenos ojos la tasa, al considerarla una buena fórmula para multiplicar el presupuesto para promoción turística y mejora de los servicios que, además, funciona con éxito en muchas ciudades. En lo que sí coinciden todos, y es un matiz que también considera el Ayuntamiento, es en la necesidad de gestionar con la máxima transparencia y eficacia dichos ingresos que sólo deberían ir destinados en beneficios del sector y, en definitiva, de la ciudad.

Los más críticos ven con incredulidad la propuesta, que califican de "globo sonda" y apuntan que la intención del gobierno de Juan Espadas es la de gravar, en este caso, al turista. Al igual que la Junta de Andalucía, apuestan por otras alternativas para ganar en turistas y calidad de los servicios. Entre otras ideas, apuntan la prioridad de regular los alojamientos turísticos alegales -cuyo control correspondería a la Junta de Andalucía-.

El Gobierno andaluz consideró ayer también que, antes que una tasa, un planteamiento para poner encima de la mesa sería solicitar al Gobierno central la reducción del IVA en turismo del 10% al 8% en hoteles y agencias de viajes o culturales que actualmente tributan al 21%, uno de los más altos de toda Europa en estos segmentos turísticos. Según el consejero, este aspecto sí que puede afectar a la competitividad turística de Andalucía.

Críticas y adhesiones. La propuesta lanzada por Antonio Muñoz a través de este periódico fue ampliamente comentada ayer en los foros especializados del sector, donde existe una corriente de empresas de servicios que claramente se posicionan a favor de la tasa. Eso sí, también con los mismos matices, que pasan por garantizar el consenso en primer lugar y luego la administración y gestión de dichos fondos.

También hubo apoyos políticos. El Ayuntamiento de Granada, que abrió con poco éxito el debate hace unos meses, se sumó ayer a la iniciativa sevillana y adelantó que volverá a estudiar una idea ya planteada anteriormente por el PP en la capital granadina y que lo hará, en este caso, en colaboración con "el resto de ciudades" andaluzas y "especialmente con la Junta de Andalucía", apuntó el alcalde, Francisco Cuenca.

El debate ya se ha abierto.

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