La aldaba
Carlos Navarro Antolín
La lección de Manu Sánchez
Funcionarios de prisiones intervinieron el martes sendas partidas de droga que iba a entrar en la cárcel de Sevilla-II, en Morón de la Frontera. Ambas remesas eran de cocaína y eran traídas por dos internos que acababan de llegar a la prisión procedentes de otras cárceles. Uno de ellos llevaba 54 gramos de esta droga y el otro 24.
La asociación Tu Abandono Me Puede Matar (TAMPM) destacó "la magistral profesionalidad y la gran y oscura labor que desarrollan día a día los funcionarios de prisiones, pese a la escasez de medios personales y materiales con los que cuentan".
Esta entidad criticó también la pasividad de la Dirección General de Instituciones Penitenciarias y recordó que los funcionarios no tienen el más mínimo reconocimiento profesional, pues ni siquiera cuentan con la condición de agentes de la autoridad mientras se encuentran en el ejercicio de sus funciones.
Esta es una reivindicación histórica de los funcionarios, que en los últimos años se han enfrentado a un aumento de la conflictividad y de la agresividad de los presos. En este tiempo se han registrado numerosas agresiones y ataques a funcionarios en las cárceles sevillanas, así como peleas entre internos que han motivado la intervención de los trabajadores de las prisiones para abortar estas reyertas.
El pasado mes de febrero, funcionarios de Sevilla-I intervinieron 30 gramos de cocaína y heroína que un interno llevaba oculto en su cuerpo al regresar de un permiso de salida. El recluso llevaba asimismo seis gramos de THC y 11 pastillas de benzodiacepinas. La droga estaba preparada en paquetillos listos para su venta y distribución entre el resto de la población reclusa de la prisión sevillana.
Temas relacionados
También te puede interesar
Lo último
No hay comentarios