Inteligencia artificial: en pleno crecimiento

Según nos dice la informática, Inteligencia Artificial (IA) es aquella inteligencia expresada por máquinas, procesadores y softwares, que serían los análogos al cuerpo, el cerebro y la mente, respectivamente, a diferencia de la inteligencia natural demostrada por humanos y ciertos animales con cerebros complejos.

Se considera que el origen de la IA se remonta a los intentos del hombre desde la antigüedad por incrementar sus potencialidades físicas e intelectuales, creando artefactos con automatismos y simulando la forma y las habilidades de los seres humanos.

En otras palabras, el término Inteligencia Artificial se aplica cuando una máquina imita las funciones cognitivas que los humanos asocian con otras mentes humanas, como por ejemplo: percibir, razonar, aprender y resolver problemas. Y en el mundo de las redes sociales ofrece múltiples posibilidades de uso, como predicción de comportamientos de compra, a partir de análisis de los patrones de uso del consumidor de internet.

IA en el tejido empresarial

Y es que la IA no deja de seguir creciendo, incluso en el mundo empresarial. El mercado de la inteligencia artificial (IA) crecerá a un ritmo del 27% al año hasta alcanzar los 1.400 millones de euros en 2025, según un estudio de la consultora IDC Research patrocinado por Plain Concepts.

Cerca de la mitad de las empresas en España utiliza o está en fase de prueba de sistemas basados en tecnología de IA o de software relacionados con esta tecnología.

Estas empresas señalan que la automatización de tareas repetitivas es la mayor de las ventajas de esta tecnología, seguida por la mejora de la calidad del servicio, del producto y también del proceso.

Para las firmas detrás del estudio, las nuevas formas de trabajar serán el principal nicho de la inteligencia artificial con el impulso de los espacios de trabajos digitales, ya que generarán un aumento de la productividad y el ahorro de costes.

No obstante, el 31% de las organizaciones no ha decidido aún cómo utilizará la Inteligencia Artificial o bajo qué arquitectura, con un 46% optando por la nube.

Asimismo, a la hora de decidir cómo desarrollar soluciones con IA, las empresas se dividen principalmente entre el desarrollo por parte de un equipo entero, apostar por un servicio general y de consultoría empresarial o contratar a una empresa especializada en desarrollo de la tecnología.

En cuanto al presupuesto, la mayoría de las empresas (54%) destina menos de 50.000 euros anuales a la Inteligencia Artificial, lo que sitúa la falta de recursos financieros como uno de los principales retos para implementar la tecnología.

Del mismo modo, otra barrera mencionada por los empresarios es la dificultad para encontrar talento en este campo o para escoger correctamente entre las distintas herramientas que hay en el mercado.