Innovación para sortear la crisis y llegar más lejos

Durante mucho tiempo se ha dicho que uno de los retos del sector del mantecado era superar la estacionalidad, pero hay quien no la ve como un problema. José Marcos Galván, director de La Estepeña, la mayor fábrica del municipio, explica que el 70% de los dulces se venden en Navidad y Estepa está posicionada. El consumidor la relaciona con la tradición, busca el producto con ganas y lo hace "estable", no se "quema". Aun así, se innova e invierte cada año.

En esta fábrica, como ejemplo, hay 24 personas fijas en plantilla -en campaña son 280- que, al margen del mantenimiento y las compras -una campaña que se concentra en cuatro meses, requiere de mucha planificación y organización- se centran en parte en el diseño y desarrollo de líneas de producto. Este año, se estrenan con tabletas de turrón. Nada al uso: con rellenos, de crispis de cereales o de mermeladas de mandarina. También han sacado un polvorón con almendras enteras. Se suman a las 350 referencias con su marca, que superan las 800, con distintos formatos, con las que fabrican para grandes distribuidoras. En el caso de La Estepeña, los productos que fabrican con la marca de El Corte Inglés, Carrefour, Día, Alcampo o Eroski son el 30% de su producción. Según el gerente del consejo regulador de la Indicación Geográfica Protegida (IGP) de Estepa, José María Fernández, en el conjunto del sector, esas grandes superficies, que han apostado por Estepa y su sello, suponen el 60% de la facturación, incluyendo Mercadona.

En lo que respecta a innovación, varias marcas comercializan mantecados sin gluten y sin lactosa y hay dos, Mantecados Fuentes y Productos Gamito, que han obtenido el certificado Halal, que garantiza que el dulce se elabora con grasas vegetales para adaptarse al consumidor musulmán. Son empresas que ya exportan a países musulmanes pero, sobre todo, a países europeos con mucha población musulmana, donde el producto está siendo bien acogido. Aun así, la exportación apenas supone todavía el 10% de las ventas. Los mantecados llegan a casi todo el mundo, pero por demanda de la colonia española.

En lo que respecta al futuro, se da por hecho que el chocolate ganará terreno, teniendo en cuenta, como recuerda José Galván -de la tercera generación de La Estepeña, nieto de los fundadores- que los hábitos de alimentación se copian siempre del Norte, más desarrollado, al que nos querríamos parecer, y en Centroeuropa el consumo de chocolate supera los diez kilos por persona y año, cuando hasta hace poco en España no llegaba a los dos. Pese a la estacionalidad, hay al menos ocho fábricas en Estepa que tienen actividad durante todo el año, fabricando bollerías, hojaldres o barritas energéticas.