Primer balance del Hospital Militar: 600 profesionales en activo y 1.500 pacientes atendidos en cuatro meses

Casi 600 profesionales, cuatro meses de trabajo y más de 1.500 pacientes atendidos entre planta y UCI. Es el balance de los cuatro primeros meses del Hospital Militar, reconvertido en Hospital de Emergencia Covid-19 desde el pasado 1 de febrero. Un periodo en el que el centro ha alcanzado una media de ocupación de pacientes Covid del 75% en el caso de las plantas de hospitalización y del 65% en Cuidados Intensivos, derivados todos de los hospitales Virgen del Rocío, Valme, Virgen Macarena, San Juan de Dios de Bormujos, Osuna, y otros de la sanidad privada como de la Quirón Sagrado Corazón.

En las últimas semanas, el índice de uso de las 141 camas disponibles roza el 50% -67 en números redondos- mientras que en la UCI el porcentaje actual de ocupación es del 72%.

Los datos fueron ayer precisados por el subgerente del Hospital Virgen del Rocío y director adjunto del Hospital Militar, Luis Martínez Hervás, del que depende administrativamente este nuevo centro sanitario, en un desayuno empresarial en la nueva sede de Rull&Asociados en el que, además, el invitado hizo balance de la gestión de la pandemia por parte de la Consejería de Salud y expuso las principales magnitudes de la gran apuesta por el Hospital Militar.

"Actualmente es un hospital que tiene la capacidad de absorber gran parte de la demanda asistencial por Covid de todos los hospitales de Sevilla, para que continúen con su actividad convencional. Es muy importante que la ciudadanía recupere la atención y el volumen de cirugías que tenía previamente y esto se ha conseguido con la reactivación del Hospital Militar", señaló Martínez Hervás, al tiempo que destacó su carácter futurista. "Igualmente, continúan los trabajos para poder ponerlo en funcionamiento completamente ofertando otros servicios sanitarios necesarios en nuestra ciudad con un concepto abierto, lo que se viene a denominar un hospital liquido en el que su atención trasciende los muros del propio centro”, adelantó el responsable sanitario.

De esta forma, Martínez Hervás destacó que "ser hospital Covid es una etapa", ya que se trata de un proyecto innovador dentro de la gestión sanitaria pública que, aunque ha nacido para dar una respuesta en plena pandemia, tiene un futuro garantizado dentro del mapa sanitario de Sevilla. "El Hospital de Emergencia Covid es una solución para el presente y un gran proyecto para siempre", ha dicho durante su intervención.

En este sentido, el director adjunto del Hospital de Emergencia Covid-19 dio algunos detalles sobre el futuro más inmediato del centro, pero también a largo plazo. De este modo, informó sobre la adjudicación de las obras de la segunda fase el pasado día 1 de junio con la que se reactivará toda la zona de hospitalización "con una vocación muy clara". "En una primera fase de esta nueva etapa vamos a solventar los problemas de hospitalización en el que caso de que fuera necesario por un repunte de la pandemia; en segundo lugar se habilitará el área de las URPA, de la rehabilitación y los quirófanos, que permitiría cierta elasticidad a las unidades de cuidados intensivos; y una tercera fase para dar cobertura a aquellas patologías especiales o enfermos con características propias como grandes dependientes o de salud mental, que tendrían difícil cobertura en un entorno de pandemia generalizado con una gran incidencia sobre los hospitales", detalló.

Más allá de la pandemia, "el hospital no se va a arrumbar", insistió Martínez Hervás, haciendo un guiño a los presentes refiriéndose a "la gran incógnita". En este sentido, el sanitario defendió "la vocación de servicio" con la que va a continuar en el tiempo. "Este hospital va a dar respuesta a muchas de las cosas que hemos aprendido durante la pandemia. Va a ser lo que llamamos nosotros un hospital liquido, es decir, va a pasar las barreras de sus propias paredes porque va a servir a la comunidad", señaló haciendo alusión al personal sanitario que trabaja en las residencias de mayores que han trabajado "muy solos" durante la pandemia "sin ser tutelados". "Vamos a intentar que sea un brazo más del sistema sanitario que se dedica a una asistencia tan especial para todos", añadió.

En la misma línea defendió la apuesta del centro en sus posteriores fases por la hospitalización domiciliaria y la sinergia con la Atención Primaria, a través de contactos periódicos de los profesionales hospitalarios con los comunitarios, así como por la continua formación. Y detalló la futura creación en el mismo de "unidades especiales, como de lesionados medulares; de soporte ventilatorio; de salud mental, que recogerá los pacientes acogidos en el Hospital de San Lázaro; varias plantas de hospitalización, que contarán con un ala exclusivamente para la telemedicina; 10 quirófanos, fundamentalmente para Cirugía Mayor Ambulatoria; zonas de cortas estancias; otros siete quirófanos menores para hacer endoscopias tanto respiratorias como digestivas; el soporte de laboratorio, farmacia y radiología; y un hospital de día", resumió.

También se refirió al personal que será necesario para el funcionamiento de este ambicioso proyecto. "El Hospital Virgen del Rocío siempre da respuesta a todo, pero dar respuesta a 500 camas más es un poco imposible con el personal que tenemos", ha sugerido al respecto sin dar más detalles.

Por otro lado, Martínez Hervás destacó el "excelente ambiente de trabajo" que existe en el actual Hospital de Emergencia Covid, y que se manifiesta en que el hospital recibe muchas más cartas de agradecimiento que reclamaciones. "Creo que es el único en el mundo", remarcó. De hecho, ha recordado la primera "gratificación" que recibieron, escrita por los familiares del primer paciente que falleció. "Quisieron agradecer el trato exquisito que dispensaron nuestros profesionales sanitarios a pesar de las limitaciones y la dura situación que nos plantea a todos este virus", incidió.

Sobre el impacto de la pandemia en la provincia y el Hospital Virgen del Rocío en los últimos 16 meses, Martínez Hervás hizo un repaso por algunas fechas claves como el 28 de enero, cuando se mantuvo en el centro la primera sesión clínica del servicio de Infecciosos, Medicina Preventiva y Microbiología en relación a las noticias que llegaban de fuera de las infecciones de Covid en otras regiones; el 3 de febrero, cuando el Virgen del Rocío fue nombrado junto al Virgen de las Nieves de Granada como hospital de referencia para las pruebas del coronavirus; o el 26 de febrero cuando, "a la una de la mañana", recuerda, "se confirmó el primer positivo en el hospital Virgen del Rocío que era un paciente de 62 años que no había viajado con anterioridad y era el primer caso en España de un contagio autóctono".

"Pese a todo, aquí todavía Simón decía entonces que no estábamos hablando de una enfermedad con unos niveles de gravedad como otras y que no era necesario que la población usara mascarilla más allá de los enfermos sintomáticos", puntualizó Martínez Hervás, en clara alusión a la gestión inicial de la pandemia en España.