El Grupo Cappuccino abrirá negocio en el local del antiguo restaurante Oriza

La cadena Cappuccino, con restaurantes en Mallorca, Ibiza, Madrid, Marbella y Valencia, desembarcará en Sevilla en uno de los locales más cotizados del centro de la ciudad: la que fue sede del restaurante Oriza en la calle San Fernando, frente a la antigua Fábrica de Tabacos. Cappuccino, que cuenta también con un hotel de cinco estrellas en Mallorca y con varias cafeterías de nivel, ha elegido un emplazamiento de privilegio para su estreno en la capital de Andalucía. Tendrá a su disposición toda la planta baja del inmueble, desde la que se tiene acceso privilegiado a las murallas del Real Alcázar. La intención del Grupo Capuccino es abrir el negocio en primavera, en la temporada alta del consumo hostelero en la ciudad.

Cappuccino se presenta como el “grupo líder de restaurantes y cafeterías de primera calidad” ubicados en los lugares estratégicos de las islas de Mallorca e Ibiza y en las citadas ciudades de Madrid, Valencia y Marbella. “Tenemos catorce Cappuccino Grand Café, dos Tahini sushi bar & Restaurant, el famoso Wellies en Puerto Portals, y desde la primavera de 2018, el Hotel Capuccino ubicado en el histórico y bello centro de Palma de Mallorca”.

La cadena busca siempre locales de ubicación “privilegiada” y que se caracterizan por una arquitectura y un diseño “increíblemente únicos”. El local elegido en Sevilla está entre dos bienes de interés cultural como son la antigua Fábrica de Tabacos, hoy sede del Rectorado de la Universidad de Sevilla, y el Real Alcázar, además de estar perfectamente comunicado y estar enclavado en uno de los accesos directos al corazón del centro de la urbe.

“Somos música, arte y cultura, pero sobre todo somos un grupo de personas que trabajan para crear una experiencia verdaderamente especial para cada uno de nuestros clientes”, aseveran en su presentación oficial.

Las plantas altas del edificio del antiguo Oriza volverán a tener uso residencial, como ya avanzó este periódico. La obra de rehabilitación comenzó hace mes y medio de acuerdo con un proyecto aprobado por Urbanismo.

El edificio está catalogado con el nivel del protección C, equivalente al título de Protección parcial en grado primero, por lo que el proyecto avalado por las autoridades municipales contempla el respeto a los valores histórico-artísticos a que obliga la ficha del PGOU. La empresa promotora es Acinsure Global Investment, S.L, de Francisco Javier y Juan Moya Yoldi.

El proyecto en ejecución contempla la rehabilitación para volver a implantar el uso original de viviendas en todas las plantas excepto en la baja. También se dotará al edificio de ascensor y se adecuarán las instalaciones a la normativa actual. La planta baja merecerá un proyecto específico que requerirá de la actualización de la licencia de apertura. De momento en la planta baja sólo se intervendrá en lo concerniente al acceso a las viviendas.

La planta primera estará ocupada por dos viviendas, una de dos dormitorios y dos baños y la otra de tres dormitorios y dos baños. La planta segunda volverá a ocuparse por dos viviendas, una de dos dormitorios y dos baños, que ocupa la esquina del edificio, y otra en forma de dúplex de tres dormitorios y dos baños, estando uno de ellos con su baño en uno de los castilletes existentes de la cubierta que se unirá a dicha vivienda a través de una escalera de caracol.

De los elementos a conservar en general destacan los siguientes: fachada, primera crujía a la calle San Fernando, zaguán y escalera, tipo de cubierta, organización tipológica, unidad estilística, disposición de la crujía, la escalera y el patio y el esquema organizativo de patios de ventilación y luces.