Griñán reitera que "sería bonito" que el alcalde acabara el mandato

El secretario general del PSOE andaluz, José Antonio Griñán, aseguró ayer que le trasladó "en su momento" al alcalde de Sevilla, Alfredo Sánchez Monteseirín" que sería "bonito que terminara el mandato" pese a su decisión de no aspirar por cuarta vez a la reelección en las elecciones municipales de 2011. En una entrevista con Canal Sur Radio recogida por Europa Press, Griñán rechazó que se pueda hablar de alcalde "interino" en el caso de Monteseirín por haber anunciado que no repetirá como candidato y recordó que el ex presidente del Gobierno José María Aznar estuvo cuatro años en el cargo "sabiendo que no iba a ser candidato y nadie dijo que era un presidente interino".

"Lo único que sabemos del alcalde de Sevilla es que no va a ser candidato en 2011, pero no sabemos otra cosa", dijo el líder del PSOE-A, que recordó que dijo a Monteseirín "en su momento que era bonito que terminara el mandato porque no ha habido nadie en la historia de Sevilla que haya tenido en democracia tres mandatos consecutivos" y puso en valor que "cualquier testigo imparcial reconoce que se han hecho muchas y muy buenas cosas en Sevilla" durante sus tres mandatos al frente del Consistorio.

Sobre los plazos para la elección de candidatos a las próximas municipales, Griñán quiso dejar claro que "en 2011 tenemos que tener candidatos fuertes que quieran ganar las elecciones y que si no las ganan quieran representar al partido durante cuatro años en la oposición", un argumento que el nuevo líder del PSOE-A viene repitiendo desde hace meses para evitar forzar a candidatos a alcaldías que, en caso de perder las elecciones, huyan del ámbito local y dejen vacantes el puesto de jefe de la oposición.

"La comisión ejecutiva federal dijo que se haría en septiembre la proclamación de candidaturas. Pedimos anticiparlas, sería bueno que para junio o julio tuviéramos las candidaturas hechas, pero no antes. Vamos a esperar", concluyó Griñán. Pese a ello, el PSOE considera que Sevilla, función de la decisión última de Monteseirín, sería una excepción.