El Gobierno de coalición entra en riesgo de ruptura

Todos los escenarios están abiertos. El Gobierno andaluz de coalición atraviesa su momento más grave después de que la consejera de Fomento, Elena Cortés, de IU, desobedeciera las indicaciones, u órdenes, de la presidenta socialista, Susana Díaz. A pesar de que desde la Presidencia se insistió durante todo el día en que la entrega de llaves a los okupas desalojados de la Corrala Utopía pudiera entrar en el terreno de la ilegalidad, la consejera de IU siguió con sus planes de facilitar pisos de la Junta a estas familias. De este modo, se altera el orden de las personas que son demandantes de vivienda en Sevilla, pero Fomento entiende que, en virtud de su ley antidesahucios, se dan las circunstancias de excepcionalidad para darles una casa de modo transitorio. Las llaves de Cortés han conseguido lo que no han procurado ni el caso de los ERE ni la aprobación de un Presupuesto para corregir el déficit público. El pacto entre el PSOE e IU corre serio peligro. El Palacio de San Telmo, sede de la Presidencia, bullía este miércoles, mientras en IU festejaban la entrega de las casas.

Aun a riesgo de su propio Gobierno, la presidenta retira las competencias de vivienda a Fomento y abre una investigación sobre la legalidad de la entrega de llaves. IU deberá medir ahora cómo contesta a los socialistas, y esto puede ser complicado debido a las diferencias que pueden surgir en el seno de la dirección de la federación de izquierdas. El choque de trenes entre la presidenta Susana Díaz y Elena Cortés, la más radical de los consejeros de IU, se produce, además, a las puertas de unas elecciones europeas, donde los socialistas andaluces se juegan tanto como romper la concatenación de victorias del PP en las urnas. Grave, además, porque los socialistas necesitan a IU en el Parlamento, sí o sí, ya que el partido mayoritario es el PP. Bastaría con que en IU se abstuvieran, para que el PP ganara en la Cámara andaluza todas las votaciones que se propusieran. Esta debilidad socialista es la que sostiene la coalición. Ahora bien, si IU lleva al PSOE al borde del abismo, si no es posible gobernar, Díaz tendría argumentos para adelantar unas elecciones que electoralmente le convienen.