El nuevo Gobierno de España no tiene aún un criterio sobre la Torre Cajasol
CCOO califica de "golpe bastante fuerte" al empleo en el sector de la construcción una posible paralización de las obras del rascacielos en el extremo sur de la Isla de la Cartuja.
El nuevo Gobierno de la nación no tiene aún un criterio definido sobre la Torre Cajasol y cuál debe ser su postura ante la polémica levantada por la construcción de este rascacielos en Sevilla, así como ante la amenaza de que la Unesco retire a tres de sus monumentos (Alcázar-Catedral-Archivo de Indias) la condición de Patrimonio Mundial.
Fuentes de la Secretaría de Estado de Cultura aseguraron a este periódico que "se valorará" la resolución que se tome en la próxima reunión del Comité del Patrimonio Mundial de junio. "Todavía no podemos definir una postura que dependerá de los próximos acontecimientos", afirmó dicha fuente. Entre estos acontecimientos está la próxima reunión solicitada por el alcalde de Sevilla, Juan Ignacio Zoido, al ministro de Educación, Cultura y Deporte, José Ignacio Wert, la cual no tiene todavía fecha.
Sobre las opiniones del Ayuntamiento de Sevilla y de Icomos que señalan a la Junta de Andalucía y el Estado como corresponsables, junto al Consistorio, de la construcción de la torre, la portavoz ministerial prefirió guardar silencio. Eso sí, dejó claro que cualquier iniciativa diplomática en la Unesco debe hacerse a través del Ministerio de Exteriores y no desde el de Cultura.
Por otra parte, el secretario general de la federación provincial de Construcción, Madera y Afines (Fecoma) de CCOO, Antonio Salazar, calificó ayer una posible paralización del rascacielos como "golpe bastante fuerte, un palo" para el empleo en el sector de la construcción. El sindicalista señaló, además, la "agudizada preocupación" que reina entre los trabajadores de esta iniciativa urbanística dadas las voces que proponen detener las obras.
Antonio Salazar explicó a Europa Press que el sector de la construcción alcanzó en Sevilla su techo al contar con aproximadamente 105.000 trabajadores ocupados en toda la provincia. Actualmente sólo unas 44.000 personas trabajan en la construcción en Sevilla, siempre como consecuencia del durísimo desplome del negocio inmobiliario en los últimos años de crisis económica. A cuenta de la polémica que rodea a la torre de 178 metros de altura que promueve Cajasol en la Isla de la Cartuja, Salazar señaló que las plantillas de las empresas encargadas de este proyecto sufren una "agudizada preocupación" a cuenta de las circunstancias que rodean a esta iniciativa urbanística.
Y es que la Organización de las Naciones Unidas para la Ciencia, la Educación y la Cultura (Unesco) tramita un expediente sobre los efectos de este proyecto en los monumentos hispalenses declarados Patrimonio de la Humanidad, toda vez que un reciente informe técnico incorporado a este proyecto aconsejaba la paralización de las obras y la revisión del proyecto dado su "impacto negativo en la percepción" del Real Alcázar, la Catedral y el Archivo de Indias.
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