La Fundación Cruzcampo paraliza la rehabilitación del edificio Palomar

Frenazo en la rehabilitación del edificio Palomar. La Fundación Cruzcampo ha comunicado al Ayuntamiento la paralización de las obras de uno de los edificios históricos más emblemáticos de la ciudad. El nuevo plazo para su puesta en servicio finaliza el 13 de julio de 2025.

Desde la cervecera apuntan que la llegada de la crisis sanitaria originada por el Covid “nos cambió la vida a todos, nos obligó a replantearnos prioridades y volcarnos con aquellos que más nos necesitaban, como ha sucedido con la hostelería y nuestro movimiento de apoyo FUERZABAR”. Destacan que, a pesar del impacto de la pandemia, han mantenido su compromiso social con una inversión de seis millones de euros para abrir la Factoría Cruzcampo el pasado mes de junio.

La Fundación Cruzcampo señala que el edificio Palomar se encuentra ahora mismo en pausa, pero esperan retomar las obras lo antes posible. “Decididos a seguir adelante en cuanto la situación lo permita, solicitamos al Ayuntamiento de Sevilla una prórroga para ampliar de cinco a siete años el plazo de ejecución de las obras, un trámite necesario para evitar posibles retrasos administrativos a futuro. La solicitud se nos ha concedido, por lo que contamos con dos años más para realizar la obra, hasta el 13 de julio de 2025”.

Por último, desde la empresa cervecera indican que, “este proyecto, como la propia Fundación Cruzcampo, son el mejor ejemplo de cómo hemos evolucionado para adaptarnos a la realidad. Para responder a los problemas que más preocupan a la sociedad en cada momento. Y en este caso, no renunciamos a sacar adelante este proyecto para ponerlo al servicio de la sociedad, atendiendo a dos de los colectivos que más siguen sufriendo las consecuencias de esta crisis, que son los jóvenes y la hostelería”.

La actuación dotará de usos distintos a este edificio principal que forma parte del complejo, el cual comenzó a funcionar en 1904, cuando se puso en marcha la primera fábrica de cerveza de Andalucía. Conocido como el Palomar, es el más alto de todos y cuenta con cuatro plantas y una extensión de 2.000 metros cuadrados. Acogerá la Fundación Cruzcampo, y la idea inicial fue que su inauguración coincidirá con el 25 aniversario de esta institución, que se ha caracterizado por su apoyo al emprendimiento sevillano.

La configuración del inmueble va en línea con este objetivo. Por ello, la primera planta acogerá una sala de exposiciones para “dar visibilidad al talento empresarial andaluz”, el cual tendrá en un segundo nivel una planta de producción y coworking para que dichas ideas se trabajen de forma “colaborativa”. En la tercera planta irá un auditorio con capacidad para 170 personas, que cumple la función del antiguo salón de actos, donde tenían lugar numerosas presentaciones de libros y otros actos. La cuarta y última planta está configurada como un espacio de encuentros. Destaca en ella las privilegiadas vistas que ofrece de la ciudad, debido a su altura y a que toda la fachada oeste del edificio va acristalada.

El segundo de los inmuebles –característico por el mosaico de su fachada– alberga desde principios de junio el Espacio Cruzcampo, concebido como “una fábrica de experiencias”, en el que tienen cabida la escuela de hostelería (con más de 20 años de experiencia) y una pequeña fábrica que produce al año 950 hectolitros de cerveza con la más moderna tecnología. Quienes acuden a estas instalaciones de Nervión pueden degustar distintas variedades de esta bebida (que se irán renovando periódicamente) y los platos que preparen los alumnos. También hay una tienda de merchandising y, como en la fundación, este edificio cuenta con paredes de cristal.