Duros reproches de Francisco Herrero a Miguel Rus por cuestionar su candidatura a la reelección en la Cámara de Comercio de Sevilla

Sevilla/La renovación de los órganos de gobierno de la Cámara Oficial de Comercio, lndustria, Servicios y Navegación de Sevilla ha provocado un enfrentamiento entre el presidente de esta corporación de derecho público, Francisco Herrero, y Miguel Rus, el presidente de la Confederación de Empresarios de Sevilla, de la que el primero también es vicepresidente.

La confirmación de que Herrero optará a la reelección para un nuevo mandato completo –es presidente desde 2006– ha provocado el incidente y que éste haya enviado una dura carta a Rus quejándose de que haya expresado en una reunión del Comité Ejecutivo de la patronal sevillana que debería pensarse en un relevo y en un cambio en la gestión de la Cámara.

La carta de Herrero a Rus, a la que ha tenido acceso este periódico y que está fechada el pasado 14 de julio, expresa la “sorpresa, incredulidad e indignación” que el presidente de la Cámara ha sentido al leer el acta del último Comité Ejecutivo, celebrado el pasado mes de junio, en las que Rus se refiere a la candidatura del primero.

La misiva reproduce el párrafo que ha provocado la reacción airada de Herrero: “El señor presidente –en referencia a Miguel Rus– añade que él no tiene ningún interés en presentarse a la presidencia de la Cámara, aunque sí considera que el actual presidente tiene ya una edad que hace necesario ir preparando la transición y un cambio en la gestión”.

Rus descartó hace algunas semanas presentarse a la presidencia de la Cámara, cargo que sería compatible con el que actualmente tiene en la patronal.

Herrero, que el próximo 17 de agosto cumplirá 81 años, afea estas palabras a Rus en la carta de protesta que le ha enviado: “No salgo de mi asombro ni puedo entender que, aprovechando mi ausencia en dicho Comité, te refirieras a mi persona en dichos términos, con una altísima falta de consideración y de respeto”, se queja el presidente cameral, que añade: “Como bien sabes, me encuentro en perfecto estado de salud y mi actividad al frente de la Cámara la ejerzo intensamente cada día y a cada hora”. “Nunca he entendido que la edad pueda ser un elemento discapacitante para ejercer un cargo”, apostillla visiblemente molesto

Además, Herrero hace una defensa de la gestión de la que es responsable en la corporación de derecho público que preside: “La de Sevilla es una institución referente entre las Cámaras de Comercio a nivel nacional e internacional, saneada, solvente, con proyectos de futuro y formada por un equipo de profesionales de innegable y demostrada valía que durante todos estos años han situado a la Cámara de Sevilla en lo más alto del escalafón de Cámaras de Comercio y tenemos un reconocimiento por parte de las instituciones públicas y del empresariado fuera de toda duda”.

Herrero hace valer también el “modelo de éxito” económico de esa gestión, al recordarle a Rus que la sevillana es “la única Cámara de España que a día de hoy factura un 50% más que cuando gestionaba el impuesto empresarial”. Las empresas están obligadas a pertenecer a las cámaras pero ya no tienen que pagar por ser miembros y las corporaciones han tenido que buscar fórmulas alternativas para lograr los ingresos.

El reproche no sólo se centra en que cuestionase su candidatura por su edad y en la necesidad de un cambio en la gestión, sino que lamenta que se hiciera en el seno de la patronal sevillana. “Está claro que confundes y expresas de forma errónea tus planteamientos en los órganos equivocados”, le escribre Herrero a Rus, al que sugiere que “ese planteamiento debería expresarlo delante de los representantes del Pleno y del Comité Ejecutivo de la Cámara, a los cuales perteneces, y conmigo presente”.

Herrero censura que la crítica no sólo no se expresó en los órganos de la institución cameral, sino que se manifestase en el Comité Ejecutivo de la CES y aprovechando su ausencia.

También le recuerda Herrero a Rus que al Confederación de Empresarios de Sevilla que preside es una organización totalmente independiente de la Cámara, porque ambas “tienen naturaleza jurídica, órganos de gobiernos y representantes diferentes”.

El presidente cameral afirma también en la carta que no logra entender las palabras de Rus y le afecta que “denotan un cierto sentimiento de propiedad de la Cámara por parte de la CES, y de forma más evidente por tu parte”.

"Nada más lejos de la realidad”, le avisa Herrero a Rus, al que recuerda; “Una cosa es que actuemos unidos en ciertos planteamientos que afectan al interés general de la provincia de Sevilla, porque así lo demandan las empresas, y otra muy distinta, confundir los ámbitos de actuación de ambas instituciones queriendo ejercer un control de una sobre la otra”.

La misiva concluye en un tono que denota que la tensión entre Cámara y CES viene de largo, ya que Herrero le señala a Rus que, en los años que lleva al frente de la Cámara –el próximo sería su cuarto mandato consecutivo– no ha permitido nunca que la patronal ejerza ningún control sobre la institución. “Y míentras siga al frente de la Cámara no lo permitiré”, agrega antes de pedirle a Rus una rectificación formal y que la carta sea leída antes de la aprobación de la mencionada acta de la anterior reunión.