Firmas para pedir el cese de María Seguí por querer forzar el uso del casco a los ciclistas en vías urbanas
La asociación Conbici ha iniciado una campaña a través de la web 'avaaz.org' porque cree que la directora de Tráfico no está siendo capaz de mantener un "diálogo franco" con las organizaciones ciclistas.
La asociación de ciclistas Conbici está recogiendo firmas, a través de la plataforma de internet avaaz.org, para pedir la destitución de la actual directora de Tráfico, María Seguí, por tratar de obligar a los ciclistas a usar casco en la ciudad, pese a la oposición mostrada por el sector. Hasta el momento, Conbici ha recogido alrededor de 1.500 firmas. Según ha explicado el director técnico de Conbici, Manuel Martín, la decisión de pedir la dimisión de Seguí al ministro de Interior, Jorge Fernández Díaz, se ha tomado no tanto "porque ella piense que el casco obligatorio es algo beneficioso para la seguridad vial de los ciclistas" sino por tomar esta medida al margen de la opinión de "la practica totalidad del sector de la bicicleta", que se opone. "No entendemos esta obcecación y por eso pedimos al ministro que proceda a su destitución porque entendemos que no está siendo capaz de mantener un diálogo franco y sincero con organizaciones que están aportando buenos argumentos en contra", ha indicado Martín, quien se ha quejado de que la obligación de usar casco en ciudad es una medida "absolutamente desproporcionada" que "no se corresponde con la legislación europea" y que puede "reducir la presencia de bicis en las ciudades".
La medida que ha puesto en pie de guerra a los ciclistas es la inclusión en el borrador de reforma del Reglamento General de Circulación, en el que actualmente está trabajando el Gobierno, de la obligatoriedad de que los ciclistas lleven casco dentro de los cascos urbanos. Hasta ahora, estaban obligados a llevar casco sólo en las vías interurbanas. En el borrador de la reforma, fechado el 25 de febrero de 2013, el Gobierno señala que se trata de una medida "coherente con el objetivo de hacer posible que las bicicletas circulen por la calzada de las vías urbanas en un contexto de seguridad". "La reforma del reglamento general de circulación que prepara la directora de la DGT, María Seguí, pese a contener algunas cosas positivas, es desde el punto de vista de todo el sector ligado a la bicicleta de España y Europa un torpedo en la línea de flotación del impulso que en estos últimos años se está dando en la normalización de la bicicleta en las ciudades españolas", señala Conbici en la petición colgada en avaaz.org.
Según esta asociación, más de 20 ayuntamientos, entre ellos Sevilla, Barcelona, Murcia, San Sebastián, Valencia, Vitoria o Zaragoza, se han opuesto a la medida. También desde el mundo del ciclismo profesional ha habido voces en contra de la medida. Así, en su blog oficial, Perico Delgado se ha mostrado crítico con la decisión y ha tachado de "cabezonería" del Gobierno tratar de obligar a usar el casco también en la ciudad. "El ministro y la directora de tráfico no creo que tengan nada contra la bici, pero sí contra el usuario. Porque si tanto miedo les da un ciclista sin casco y su responsabilidad moral es evitarlo, también está en su competencia, poner las medidas de seguridad correspondientes, en otros ámbitos, como por ejemplo a todos los participantes de los numerosos encierros que se producen en nuestro país cada año, cuando ahí el riesgo es evidente, como desgraciadamente lo pueden corroborar los hospitales en esas fechas", ha indicado Delgado.
Por su parte, el director técnico de Conbici ha criticado que se compare, para justificar la medida, la bicicleta con la moto, lo que, a su juicio, "no se sostiene" porque la velocidad que alcanzan ambos vehículos "no tiene nada que ver", así como que se ponga el acento en los ciclistas, cuando la cifra de ciclistas muertos en accidentes en vías urbanas ronda los 12 a 16 al año, un dato alejado de la "auténtica plaga" que suponen los accidentes de coche. La reforma del en la que trabaja el Ejecutivo da una entidad propia a los ciclistas dentro del Reglamento General de Circulación que hasta ahora no tenían. Además, de la obligación que afecta a los ciclistas, también se suprimen en el caso de motocicletas y ciclomotores la exención médica para no utilizar el casco de protección y la posibilidad de uso de cascos certificados, no homologados.
Circulación limitada en las aceras
En cuanto a la circulación en las aceras, el borrador establece que en el ámbito urbano se podrá permitir que las bicicletas transiten por las aceras y demás zonas peatonales, "en los términos que se establezcan mediante ordenanza municipal", aunque precisa que "en ningún caso podrá permitirse el tránsito de bicicletas por las aceras y demás zonas peatonales" en las aceras cuya anchura sea inferior a 3 metros, cuando la densidad de peatones lo impida por causar riesgo o entorpecimiento indebido ni tampoco a una distancia inferior a un metro de la fachada de los edificios. El borrador, sin embargo, hace una excepción a estos supuestos y señala que "los menores de 14 años podrán circular en bicicleta por las aceras y demás zonas peatonales, siempre que la densidad de peatones lo permita". Además, se permite a un adulto acompañar a los menores por la acera.
El peatón tiene prioridad
En cualquier caso, el borrador precisa que cuando el ciclista circule por la acera y por las demás zonas peatonales, "el peatón tendrá siempre la prioridad sobre el ciclista" y éste deberá adaptar la velocidad de su marcha para no poner en riesgo a los peatones. Además, apunta que tendrá que llegar a detener la bicicleta si fuera necesario para garantizar la prioridad del peatón. En las zonas conocidas como aceras-bici, el ciclista circulará a "velocidad moderada", estando en todo momento atento a la irrupción de peatones y especialmente de niños y personas con movilidad reducida en el carril reservado para ciclistas.
En general, el borrador señala que los ciclistas "circularán a la velocidad que les permita mantener el control de la bicicleta", siempre respetando los límites de velocidad de cada vía. En carreteras convencionales, el límite se fija en 45 km/h, aunque se contempla que se podrá superar ese límite de velocidad "especialmente en descensos pronunciados, sin sobrepasar en ningún caso los límites de velocidad establecidos para el resto de los vehículos". En cuanto a su posición en la vía, se fija que en carreteras con un límite de velocidad superior a 50 km/h, los ciclistas circularán por el arcén de su derecha, si fuera transitable y suficiente, y si no lo fuera o no existiese arcén, por la derecha y lo más cerca posible del borde de la calzada. No obstante, se permite en los descensos prolongados con curvas, cuando sea posible hacerlo con seguridad, abandonar el arcén y circular por la parte derecha de la calzada.
En vías de velocidad igual o inferior a 50 km/h, que tengan al menos dos carriles de circulación por sentido, los ciclistas deberán circular por la calzada y por el carril derecho, favoreciendo la circulación del resto de vehículos. Podrán circular por los otros carriles cuando vayan a cambiar de dirección o cuando lo precisen. También se permite a los ciclistas circular en posición paralela, en columna de a dos, y colocándose en hilera en tramos sin visibilidad o en caso de que están formando aglomeraciones de tráfico. Asimismo, se permite que adelanten por la derecha o por la izquierda, según sea más seguro.
También te puede interesar
cambio de criterio tras un informe sobre el pgou
Urbanismo recula y permite ahora unir edificios distintos en el Casco Antiguo
Lo último
Blitz | Estreno en AppleTV+
Una odisea bajo las bombas
El maestro Juan Martínez que estaba allí
Juan Martínez existió
Contenido ofrecido por Alhambra