Finalizan las protestas del campo en Sevilla con el regreso de los tractores

Tras tres horas de protestas y reivindicaciones, los agricultores sevillanos han dado por finalizada la jornada con el regreso de los tractores que desde las 11:00 horas han bloqueado cuatro de las principales vías de entrada y salida a Sevilla. Los miles de manifestantes, más de 5.000 tractores y 16.000 agricultores y ganaderos según los primeros datos, han emprendido el camino de vuelta en torno a las 14:00 horas.

La intensa jornada del campo sevillano ha dejado el cierre total al tráfico de varios puntos de la A-49, A-4, AP-4 y A-92, con retenciones que han sido intermitentes por lo que no se han generado demasiados momentos de tensión por un colapso de tráfico que ha sido moderado a diferencia de lo que se vivió la semana pasada por ejemplo en Granada donde las columnas de tractores entraron a la capital y culminaron en una gran manifestación por el centro.

En el caso de Sevilla, la acción reivindicativa ha estado focalizada en el corte de las cuatro autovías de acceso a la capital pero sin repercusiones ni en los colegios ni en la movilidad en la capital más allá de los problemas de atascos propios de estas horas.

Tampoco se han registrado incidentes, detenciones ni altercados que enturbiaran la masiva protesta que el campo sevillano ha protagonizado siguiendo la hoja de ruta de protestas impulsada a nivel nacional. Sí se han vivido algunas situaciones de tensión que han sido controladas por la Guardia Civil.

Los convocantes valoran el "éxito" de la convocatoria, pero destacan que lo preocupantes es la situación "insufrible" que está viviendo el campo sevillano. "Desgraciadamente es un éxito porque la situación es insufrible e inaguantable para el sector agrario y esto es una muestra de que los agricultores y los ganaderos están llegando al límite y esto no se puede soportar más. Es un éxito la convocatoria, pero lo que hace falta son soluciones", ha dicho al final de la marcha el secretario general de Asaja Sevilla, Eduardo Martín.